Por Apostol Demontae Edmonds
Traduccion por Apostol Jose A. Quintero-DeJesus
¿Por qué tantos "apóstoles"?
Publicación larga
Muchas veces me han planteado la pregunta "¿Por qué hay tantos apóstoles" de repente y muchos de ellos se convierten en apóstoles "de la noche a la mañana". Por supuesto, en los últimos 20 años, el Cuerpo ha experimentado un nivel de Reforma Apostólica, pero mucho de lo que estamos viendo, especialmente dentro de un segmento cultural minoritario de la "Iglesia" o "El Cuerpo de Cristo", es una cantidad desmesurada y excesiva de individuos que se han autodesignado o han sido falsamente designados para el oficio apostólico.
Hace años, muchos buscaban el título de obispo porque ser obispo era popular. Me encantó lo que dijo Creflo Dollar sobre sus amigos que estaban tratando de convencerlo de que se convirtiera en obispo, ya que tenía un ministerio tan grande y porque la mayoría de ellos eran obispos. Dios le dijo en oración que eso no era algo que él quería que asumiera por sí mismo, sino que continuara en la tarea que Dios lo había llamado a cumplir. En los años 90 y principios de los 2000, muchos se estaban convirtiendo en "profetas". Conocí al menos a dos profetas que NUNCA profetizaron y me dijeron que no podían profetizar, pero los líderes de la iglesia les pusieron el título para mantenerlos cerca y leales. Triste pero cierto. Al menos con el oficio profético uno puede discernir individualmente a alguien que NO es un profeta real porque no tiene los dones, la precisión y la demostración, etc. El oficio de apóstol es para los que no tienen conocimientos y a menudo es más difícil de discernir porque no hay un rasgo que lo distinga, ya que es un don multifuncional. Por lo tanto, a menudo es más fácil para alguien pretender ser un apóstol que ser un profeta.
A continuación se presentan algunos relatos personales de intereses que revelan que esta TENDENCIA de un número excesivo de apóstoles falsos y prematuros es un PROBLEMA DE CORAZÓN Y EGO más que un problema de enseñanza.
1- Un predicador una vez me pidió reunirse conmigo en privado para recibir consejo. Casi me rogó que me reuniera con él y lo ayudara, ya que su vida estaba trastocada. Una de las cosas que le dije fue que él NO era un apóstol y que ni siquiera necesitaba ser pastor. Pensé que se resistiría a mis palabras, pero inmediatamente dijo: "¡LO SÉ!". Estuvo de acuerdo con cada una de mis palabras, pero unas semanas después envió un nuevo volante con una reunión en su iglesia y el título de "apóstol" junto a su nombre.
2- Recientemente, un joven aceptó (en contra de muchos consejos piadosos) una ordenación como apóstol. Sin embargo, varios talentos apostólicos experimentados/maduros/reputados ya le habían dicho directamente que no era su temporada para este cargo, sino que faltaban unos años. Había una mujer a la que siempre estimó en privado y en público como una madre espiritual y mentora para él. A otra le había pedido que trabajara con él en calidad de mentor. Además, un total de 5 apóstoles experimentados dijeron que estaría fuera de temporada si aceptaba este nombramiento. El joven estuvo de acuerdo con las personas en privado, pero aun así lo hizo. Peor aún, la persona que realizó el servicio era un discípulo de uno de los apóstoles, quien le dijo que el joven no estaba listo.
3- Después de predicar en una iglesia, me reuní con los líderes en su oficina privada. Me preguntaron si había algunas palabras para ellos que no quisiera decir públicamente. Le dije al esposo que estaba usando el título de "apóstol" ilegalmente y que no tenía el fruto ni la gracia para eso, aunque tenía la placa en la pared. Frente a su esposa en ese momento, bajó la cabeza, firmó y confesó que sabía que yo tenía razón y que todo era verdad. Después de que me fui, se puso furioso conmigo, aunque solo dije la verdad en amor.
Podría dar varios relatos más, pero en casi todos los relatos hay un nivel de idolatría del corazón involucrado. Un espíritu de orgullo y egoísmo que hará que las personas NO caminen en la verdad, incluso si es bíblica o dada por varios líderes bien fundamentados. Uno de los desafíos para maximizar la ventana de la Reforma Apostólica es que los verdaderos apóstoles necesitan ser tan fuertes y estar alineados con el corazón y la mente de Jesús que puedan hacer una separación entre aquellos que quieren desviar al Cuerpo y aquellos que por inmadurez (quizás no intencionalmente) hacen más por atrofiar el crecimiento del Cuerpo de Cristo. Necesitamos más padres y madres espirituales verdaderos que nos ayuden a prevenir algunas de estas tendencias erróneas y a caminar en el espíritu de la verdad.
