domingo, 29 de mayo de 2011

Siline: Precioso Jesus

EN BENDICION, NO EN MALDICION: Apóstol Alfonso Aponte (Puerto Rico)

El Poder de la Sangre de Cristo #3
La sangre que brotó de la cabeza de Cristo nos libertó de la maldición de la ley. Hoy podemos vivir una vida de libertad y abundancia, gracias a esa corona de espinas.
Juan, 19:2 Y los soldados entretejieron una corona de espinas, y la pusieron sobre su cabeza, y le vistieron con un manto de púrpura;
Mat 27:28-31 y desnudándole, le echaron encima un manto de escarlata,
y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una caña en su mano derecha; e hincando la rodilla delante de él, le escarnecían, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos! Y escupiéndole, tomaban la caña y le golpeaban en la cabeza. Después de haberle escarnecido, le quitaron el manto, le pusieron sus vestidos, y le llevaron para crucificarle.
La maldición de la desobediencia incluye las espinas…
Gén 3:16-18 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti. Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida. Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo.
Ninguna maldición viene de la nada…
Pro 26:2 Como el gorrión en su vagar, y como la golondrina en su vuelo,
Así la maldición nunca vendrá sin causa.
Señales de una maldición:
1. Problemas mentales o emocionales
2. Enfermedades crónicas que se repiten
3. Esterilidad
4. Rompimientos matrimoniales o una tendencia a tener problemas familiares
5. Una continua insuficiencia financiera
6. Tener una tendencia a sufrir accidentes
7. Un historial de familiares con tendencias suicidas

La Maldición detiene todo mover de Dios…
Jos 7:10-13 Y Jehová dijo a Josué: Levántate; ¿por qué te postras así sobre tu rostro? Israel ha pecado, y aun han quebrantado mi pacto que yo les mandé; y también han tomado del anatema, y hasta han hurtado, han mentido, y aun lo han guardado entre sus enseres. Por esto los hijos de Israel no podrán hacer frente a sus enemigos, sino que delante de sus enemigos volverán la espalda, por cuanto han venido a ser anatema; ni estaré más con vosotros, si no destruyereis el anatema de en medio de vosotros. Levántate, santifica al pueblo, y di: Santificaos para mañana; porque Jehová el Dios de Israel dice así: Anatema hay en medio de ti, Israel; no podrás hacer frente a tus enemigos, hasta que hayáis quitado el anatema de en medio de vosotros.
Si la maldición viene por el pecado, Dios nos dio un remedio para ello…
El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. Pro 28:13
El único sacrificio que nos libera de la maldición es el de Cristo…
Heb 10:3 Pero en estos sacrificios cada año se hace memoria de los pecados; porque la sangre de los toros y de los machos cabríos no puede quitar los pecados.
Heb 10:12 pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios, de ahí en adelante esperando hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies; porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados.
La Sangre de Cristo puede deshacer toda maldición en nuestra vida…
1 Juan 1:5-7 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él. Si decimos que tenemos comunión con él, y andamos en tinieblas, mentimos, y no practicamos la verdad; pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.
Ya el precio de nuestra maldición fue pagada en la Cruz por la Sangre de Cristo…
Gál 3:13-14 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero), para que en Cristo Jesús la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles, a fin de que por la fe recibiésemos la promesa del Espíritu.

El decreto de maldición anulado…
Col 2:13-15 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados,
anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz, y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.

El espíritu de Absalón

Absalón era uno de los hijos del rey David, y significa "padre de paz", pero él no piensa en paz, sino en promover disturbios, ya que intentó apoderarse ilegítimamente del trono de Israel. La espada profetizada por Natán contra la casa de David había actuado entre sus hijos (Absalón asesinó a su hermano Amnón), ahora iba a volverse contra su persona. Si hubiese hecho justicia contra este asesino, habría eliminado al traidor.

Tan pronto como Absalón es restaurado a su lugar en la corte, ya desea verse en el trono. Si hubiese tenido sentido de gratitud, habría procurado comportarse con su padre lo mejor posible. Le dio muestras falsas de gran respeto y anhelo de búsqueda de su favor, pero la intención velada era buscar una oportunidad para suplantarle. Primero Joab, un hombre de estado, buscó que perdonaran a Absalón, para que volviera del destierro en el territorio de su abuelo (Gesur), y luego le quema los campos a Joab, como medio de extorsión para volver a estar dentro de los consejeros reales (2 Sam 14:30-33).

=Este espíritu de Absalón se encuentra o trabaja en toda iglesia, matrimonio, familia, equipos ministeriales, ministerios reconocidos, en nuestro trabajo, etc. Es el espíritu de rebeldía y deslealtad, que divide matrimonios, familias, iglesias, sembrando lágrimas y contiendas=.

Si queremos vacunarnos preventivamente de este mal, y ahorrarnos divisiones, lágrimas, pleitos y otras malas cosas, debemos considerar detenidamente este tema, necesitamos conocer las armas que el enemigo usa. Ver 2 Samuel 15, donde Absalón se subleva.


Comienza a hacer ejercicios militares "inocentes", ya que anda con carros y caballos, cosas que trajo de la casa del abuelo, pareciendo así un personaje importante, mientras David andaba en mula (pareciendo despreciable). Esto alimentaba su fantasía y Quienes saben obedecer como es debido, sabrán mandar como es justo.


David había cumplido esto al pie de la letra, Absalón no. Son verdaderamente buenos los que lo son en su propio lugar, no los que intentan hacer ver lo buenos que serían si ocupasen el lugar de otros.

Absalón quería ser juez(15:4), el que debió ser juzgado y sentenciado a muerte por asesino, ahora anhela juzgar a otros, tiene la desvergüenza de ambicionar ser juez de los demás.

En ocasiones, es cosa corriente que los menos aptos para un cargo sean los más ambiciosos, mientras que los mejor calificados son los más modestos y menos confiados en si mismos.

Absalón quiso ganar terreno con el pueblo para ello:

a) Le metió en la cabeza de la gente, lo mal que marchaba todo, y que nadie se preocupa de ellos: "no tienes quien te oiga de parte del rey" (15:3). Algo así como que el rey se está ocupando de tantas cosas que no tiene como atenderte, pero si llega Absalón a ser rey, las cosas serán diferentes. El ambicioso y sedicioso, tiene siempre reproches.

b) Lo bien que haría él si gobernase la nación. Se recomienda a si mismo:

1. Como muy diligente.

2. Como muy interesado en los asuntos del pueblo.

3. Como muy humilde (v.5).

La conspiración llegó y veamos como actúa el espíritu de Absalón:

1) El espíritu se mueve en alguien que está cerca y relacionado contigo. (Absalón era hijo de David).

Es decir, que si estás en el liderazgo, afectará a alguien que está muy cerca tuyo. La división de una familia, de una iglesia, o de un país, surge desde adentro, no viene del exterior. La conquista viene desde afuera. Si estás batallando más de la cuenta con la amargura, los pleitos continuos, en lo familiar o con tus colaboradores, debes cuidarte.

Tenemos el caso de uno de los hijos de Noe. Después del diluvio, Noe se emborrachó con el fruto de su viña, y en ese estado se desnudó. Uno de sus hijos, Cam, denigró a su padre al divulgar esa falta. Era en extremo serio, porque su papá era la autoridad familiar, el gobierno civil del mundo yla autoridad espiritual, porque Dios se revelaba a este hombre. Un hijo es alguien muy cercano. Otro caso ejemplificador fue cuando María y Aarón tuvieron celos de su hermano Moisés, a causa del trato especial que Dios tenía con él.

La tercera carta de Juan, nos presenta a Diótrefes, que de alguna manera había tomado por asalto el liderazgo de una pequeña obra misionera que dependía de la iglesia de Efeso. Con exceso de poder, impedía a Gayo ejercer su ministerio pastoral, y a Juan el apostólico. Diótrefes era alguien cercano a ambos.

En Juan 18:3-5 vemos que una compañía de alguaciles, con linternas, antorchas y espadas van a arrestar a Jesús, cuando podían haberlo hecho en otro momento y lugar. A su vez, podemos leer Mateo 26:47-50, donde Judas besa a Jesús cuando lo saluda con: "¡Salve Maestro y le besó!" y la respuesta fue: "amigo, ¿a qué vienes?".

Pablo fue abandonado por Demas quien se fue tras el mundo, y Alejandro el calderero le causó muchos males, siendo personas muy cercanas al apóstol. Himeneo y Alejandro son mencionados en 1 Timoteo 1:19-20, quienes fueron entregados a Satanás para que aprendan a no blasfemar. Necio orgullo. David no percibe estas oscuras intenciones.

2) La historia de Absalón (2 Samuel 14:24-15:13).

Absalón había estado fuera del reino, David lo había desterrado por haber matado a su hermano Amnón. El rey no quería ver el rostro de Absalón. Entonces Joab hizo las paces entre David y Absalón, de tal manera que el rey permitió a su hijo regresar a Jerusalén, pero no le permitió ver su rostro. "No había en Israel ninguno tan alabado por su hermosura como Absalón, desde la planta de su pie hasta la coronilla, no había en él defecto. Cuando se cortaba el pelo, lo cual hacia al fin de cada ano pues le causaba molestias, pesaba el pelo 200 siclos de peso real (unos 3 kg) y permaneció en Jerusalén por dos años sin ver el rostro del rey..".

Habiendo sido un hijo de los preferidos, privilegiado, el más hermoso, y habiendo pasado ya dos años en Jerusalén sin poder ver al rey, Absalón manipuló a las personas y éste le concedió ver el rostro. Una vez más pareció estar todo arreglado. David perdonó y besó a Absalón, y le concedió su petición. Pero: "...aconteció después de esto que Absalón se hizo de carros y caballos y de cincuenta hombres que corrieran delante de él. Y se levantaba Absalón de mañana, y se ponía en el camino junto a la puerta y abordaba a todos los que venían junto al rey...y así robaba Absalón el corazón de los de Israel". Todo esto sucedió por espacio de cuatro años. (A este espíritu no le importa cuanto tiempo le lleve con tal de lograr su objetivo) Al cabo de ese tiempo, Absalón preparó la conspiración contra el rey. "Y la conspiración se hizo poderosa, y aumentaba el pueblo que seguía a Absalón y un mensajero vino a David diciendo: El corazón de todo Israel se va tras Absalón".

9) Estamos tratando con un espíritu de rebeldía y conspiración.

Esto es algo subterráneo, es algo que se hace a escondidas. No se levanta uno una mañana, y decide conspirar contra el líder o ser desleal. Todo va desarrollándose paulatinamente en la persona que ha sido tocada por este espíritu. Y si algo no para esto, si Dios no revela eso y le pone un freno, entonces le llevará a través de todos esos pasos hasta la destrucción del ministerio donde él está y de su propia vida.

PRIMER PASO: Manipula las personas para recibir reconocimiento.

Comienza cuando se siembra la semilla del descontento en una herida y se guarda. Absalón tenía una herida de rechazo, el rey lo había desplazado, habiendo sido un posible sucesor al reino. En todos esos años, él se ha estado preguntando: "¿Qué hago? Tengo que restablecer mis relaciones con el rey..." Por eso manipuló a Joab. Aparentemente arregló las cosas con su padre, lo reconoció como rey, se sometió a él y prometió servirle. Pero, inmediatamente después, comenzó a obrar con espíritu de rebeldía: maniobró y manipuló a las personas para recibir reconocimiento.

Los cincuenta hombres con carros y caballos pregonaban al paso de Absalón: "Viene Absalón, viene el hijo del rey". Este buscaba la autopromoción. Buscaba lo suyo, no buscaba levantar a David sino su propia gloria. En Filipenses 2:20-21, Pablo dice: "...todos buscan lo suyo propio, lo que no es de Cristo Jesús...". Están promocionando su ministerio, están buscando su lugar y declarando su validez. Todo esto proviene de un espíritu independiente. Es causado por el que dice: "Yo lo haré...", "Yo voy a hacer tal cosa...". De esta manera, la persona pierde el deseo de servir. Cuando manipula para que se le reconozca, es porque ha perdido el deseo de servir al Cuerpo de Cristo.

Absalón en ningún momento demostró un deseo de servir, sino que empezó a buscar levantarse a sí mismo. No coopera en equipo, prevalece en él un espíritu independiente. Ya no integra las reuniones de equipo, pues con toda seguridad comienza a moverse en él un deseo de reconocimiento personal. Uno que no puede trabajar en equipo y tiene un espíritu independiente, está en peligro. Le falta un corazón de siervo y quiere ser reconocido.

Los líderes más nuevos son los más propensos a sentir estas cosas, a ser el blanco del ataque de Satanás. Porque de esta forma se puede destruir la obra a través de ellos y cualquier ministerio que ellos levanten después. También será destruida por el fruto que van a segar.

Hay muchos jóvenes ministros que están seguros que Dios los ha levantado para ser una sensación, pero se equivocan, Dios los ha levantado para ser siervos. Cuando se pierde el espíritu de servicio, entonces se pierde todo lo que se puede ofrecer a la iglesia de Jesucristo. En Mateo 20:27, Jesús dice: "El que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo".

A todos nos gustan los dones ministeriales y los títulos. Todos preferimos los dones que se ven, que se usan. Queremos reconocimiento y muchos buscan funcionar con estos dones ministeriales, pero pocos sienten el llamado a servir fregando el suelo. En Romanos 12:6-8 se mencionan los dones de servir y de dar con liberalidad. Cuando Dios vea la fidelidad en estos dones de servicio con seguridad va a levantarte a dones ministeriales, pues jamás Dios toma a alguien de la nada y lo establece como un apóstol. Dios toma a una persona y ve que tipo de espíritu tiene. ¿Puede servir? ¿Tiene deseos de servir? Si es así, el Señor lo va a ir levantando, aunque él ni siquiera se de cuenta de lo que Dios está haciendo. Hasta que no podamos ser fieles en los dones de servicio, demostrando el corazón de siervo, Dios no nos va a levantar a ser rey.

Cada ministerio que Dios levanta necesita sus servidores. Moisés tuvo su Josué. Durante la vida de Moisés, nadie hablaba de Josué, sólo se hablaba de Moisés; sin embargo Josué estaba a su lado continuamente. En ningún momento Josué intentó buscar lo suyo, él tenía corazón de siervo, y Dios lo había levantado para servir a Moisés en este período de su vida. Moisés murió y el manto del liderazgo cayó sobre Josué, porque había sido fiel durante los cuarenta años en el desierto.

Lo mismo ocurrió con Elías, el gran profeta, ejerciendo dones ministeriales y de milagros. Pero allí, a su lado, encontramos a otro del cual no se dice mucho. Eliseo sirvió a Elías hasta que el Señor se lo llevó. ¿Quién quedó con su manto?, Eliseo. ¿Quién partió las aguas del río Jordán? Eliseo. Y, ¿quién hizo el doble de milagros que hizo Elías? Eliseo. Porque aprendió a servir al que Dios había levantado sobre él.

Pablo tenía a Timoteo, que le servía por donde él iba. Aún cuando todos le abandonaron, Timoteo quedó fiel a su lado. Más tarde, Dios levantó a Timoteo como obispo de Efeso porque había aprendido a servir.

Hay ministerios que no funcionan sin "Timoteos". No perdamos nuestro corazón de siervo. Apoyemos a los pastores, sirviendo y levantando otros ministerios en los cuales Dios nos pone como colaboradores. Cada hombre de Dios necesita de estos dones de servicio. Entonces el manto de doble unción caerá sobre el que sirve.

Alguien con el espíritu de Absalón no puede funcionar así, siempre busca promocionar su propia visión y menospreciar la visión de otros. Cuando le toca predicar, usualmente presenta una nueva revelación o un nuevo tema. Si la iglesia está tratando el tema de la autoridad u otro, de repente se levanta y dice: "Anoche orando, de pronto tuve una visión y Dios me dijo lo que la iglesia necesita ahora: Santidad y oración, ya bastante se ha hablado sobre el tema de la autoridad. Santidad y oración, es lo que se necesita”. Generalmente, esas personas están funcionando con un espíritu de Absalón. Dios da la visión del ministerio al líder, éste presenta la visión a la iglesia, y los que ayudan están para apoyar esa visión. Con esto no estamos hablando de un discipulado dictatorial. "Aquí está el rey, y vosotros los peones ahí abajo". No es eso, sino que es la forma que Dios ha establecido para que su cuerpo funcione. Pero éstos, que están funcionando en el espíritu de Absalón, siempre quieren promocionar lo suyo para que se diga: "¡Vaya, él si que predicó algo distinto! ¡El si que tiene nueva revelación! Lástima que los otros pastores no predican así".

SEGUNDO PASO: Maniobrar para recibir la alabanza de los hombres

"Se levantaba Absalón de mañana (era bien espiritual), y se ponía junto al camino". Entonces Absalón le decía: - "Mira, tus palabras son buenas y justas, más no tienes quien te oiga de parte del rey. ¡Quién me pusiera por juez sobre la tierra!".De esta manera los que le escuchaban decían: - "¿Tú me harías justicia?". - "¡Claro hombre, yo te haría justicia si fuese un juez!". - "¡Oh, que maravilla, voy a orar a ver si Dios te levanta a ti!".

Allí ya se maniobró se manipulo para recibir la admiración y la alabanza de otros. Aquí ya comienza a entrar un espíritu de actor, ya todo es actuación, todo es espectáculo. Ya no es tanto la oración para recibir la unción que Dios da, sino más bien, ¿Qué puedo hacer? ¿Cómo puedo comportarme? ¿Qué tema puedo tocar para que otros me digan: "que bien lo hiciste"? todo lo que hace es para que otros lo alaben. Su motivación es el aplauso de los hombres.

Ahora, ¿por qué quieren ser reconocidos? Usualmente quieren ser reconocidos por el pastor o por todo el liderazgo, para que todos digan "que bien lo hiciste". Pero si el liderazgo no lo reconoce no le importa, buscará a cualquiera para que lo reconozca. "Tienes una buena causa, yo quiero ayudarte". Un servidor leal a Jesucristo, por el contrario, no solo no quiere ser visto sino que no le importa.

TERCER PASO: Actitud de orgullo espiritual.

A causa de haber oído las alabanzas del pueblo de Dios hacia su persona, comienza a crecer en su pecho el orgullo espiritual. Comienza a decirse a si mismo:"Por fin la gente se está dando cuenta de mis habilidades y de que se dirigir". Y todo esto termina como en el caso de Absalón: "Yo debería ser el líder".Ya en este punto se cree mejor que los demás y nunca acepta estar mal. El orgullo espiritual lo comienza a inflar, y pronto lo que sale de su boca es: "Si soy tan ungido, y el Señor me usa tanto, ¡quien me pusiera como juez!". "Dios levántame, es tiempo ya de jubilar al otro. Levántame como líder!". Este orgullo espiritual generalmente lleva a presentar sus ideas y proyectos al liderazgo. Como este no las recibe dice: "¿Qué pasa con el liderazgo y con su discernimiento espiritual? ¿Qué pasa? ¿Ya no pueden percibir cuándo las cosas son de Dios y cuándo no lo son?". Esto es orgullo espiritual.

CUARTO PASO: Cuestionar y poner en tela de juicio la autoridad y la espiritualidad de los líderes.

Ya que no ha sido aceptada su propuesta y sus ideas, o siente que lo están poniendo a un lado, entonces empieza a cuestionar la autoridad espiritual de los líderes. Esto sucede especialmente con personas cuyas ideas han sido útiles en su momento. Al quedar ofendido, comienza a buscar personas que estén de acuerdo y que apoyen lo que él siente.

Absalón comenzó a minar la confianza en el rey. "El rey no quiere oírte", "está siempre ocupado", "él no está orando", "no tiene discernimiento espiritual", "si tu vas al rey, él te va a enviar por allí nomás, pero yo....yo te escucho porque te amo".
Y si esto progresa, llegamos al quinto paso.

QUINTO PASO: Crítica contra el liderazgo.



Ya es algo externo, ya empieza a criticar abiertamente. El hombre o la mujer que ha llegado a este punto empieza a usar tanto sus propias ideas como el criterio sobre el cual juzgar las decisiones del liderazgo. Esto lleva a un espíritu crítico. La crítica es una de las cosas más destructivas que puede existir, ya que mina la confianza más rápido que cualquier otra cosa. Si te vuelves una persona crítica, te aseguro que dentro de un tiempo no tendrás amigos, porque a cada uno de ellos, le criticarás la conducta del otro. Proverbios 16:18 dice: "El perverso siembra la contienda".

El que se interesa en las heridas de otros para usarlas a su favor, está manipulando a la gente para su propio beneficio. El que está funcionando en este espíritu absalónico va por la iglesia buscando personas heridas, los que en alguna circunstancia no han estado del todo de acuerdo con el pastor o el liderazgo. Las busca y las encuentra, porque todo pastor y liderazgo tienen fallas o cometen errores. Pero el que se interesa en las heridas de otros para usarlos y no para salvarlos, no es de un espíritu correcto.

Esto no implica que el pastor y el liderazgo estén exentos de corrección. Por el contrario, deben estar abiertos a ideas o a personas que no han entendido muy bien lo que se hace o que han pasado por algún mal entendido. Pero si a cada cosa que el liderazgo hace, tú estás diciendo: "Yo no lo haría así, yo lo haría de otra manera", entonces cuídate.

SEXTO PASO: Espíritu competitivo.

Toma las decisiones del liderazgo y las distorsiona, presentándolas a sus seguidores. Generalmente es una verdad a medias. Manipula la verdad como a él le conviene, para comenzar una competencia entre él y el liderazgo. Lo que comenzó a hacer Absalón se prolongó en especial por 4 años, hasta el desenlace fatal de los hechos. No es algo que ocurre de inmediato. Dios siempre quiere poner líderes sólidos y arraigados en la Palabra. Por eso el enemigo tiene tanto interés en atacar a los futuros líderes. Por eso debemos anticiparnos a los peligros futuros, y trabajar en consecuencia, siendo más astutos que él, para que no logre sus objetivos.

La persona que el enemigo quiere usar, es alguien con grandes dones, habilidades y cualidades especiales. Todos cifran en él grandes esperanzas como futuro líder, por eso mismo el enemigo da contra él con este espíritu absalónico. Absalón era el más hermoso de todo Israel. No se contentaba con eso, quería reemplazar al rey, no quería autoridad sobre él mismo. David le había protegido, dado su favor, pero él quería mucho más. El diablo busca a los líderes para usarlos, y su estrategia es dividir y conquistar (Mr 3:24-25). Un reino dividido no puede mantenerse en pie. Si la iglesia se divide, caerá.

SEPTIMO PASO: Sugiere un camino mejor.

Dice: "Yo pienso que si hacemos las cosas de esta manera, entonces sería mucho mejor....".Esto no queda allí sino que comienza a levantar su propio grupo de seguidores. Siempre en una iglesia habrá alguna persona que no esté de acuerdo con el liderazgo, y el Absalón buscará a esa persona para añadirla a su grupo.

En este punto es donde Dios prueba la fidelidad a él antes que al liderazgo. No obstante, Dios te probará para ver si puedes someterte a un liderazgo por más que no todas las cosas que se hagan te convenzan.

¿De dónde vino el espíritu de Absalón?, de Lucifer, antes de ser Satanás. De ahí nace este espíritu absalónico, y ya sabemos donde lo llevó a Lucifer, a Absalón y a cada persona que sigue obrando como él.

OCTAVO PASO: Atrae a las personas a él mismo.

=Ya no hace discípulos de Jesucristo, sino que hace discípulos suyos, los atrae a sí mismo=.Cuando un grupo funciona sobre esta base, no vamos a encontrar personas que estén siendo salvadas, sanadas, ni liberadas. El grupo que ha basado su confianza en un Absalón, en la rebeldía, en el desconformismo, no puede tener los frutos del Espíritu de Cristo, no puede Cristo edificar su iglesia a través de la rebelión, los malos entendidos, o la crítica. Pero aquí Absalón envuelve a sus seguidores en su crítica y en su rebelión.

Un grupo rebelde que se divide, es un grupo que está destinado a la muerte espiritual.

Cristo jamás usó estos métodos para construir su iglesia y su reino. Lamentablemente así comienzan muchas iglesias. Parece estar de moda el método de la división para "evangelizar". Sin embargo una iglesia sana se edifica sobre la salvación de los pecadores, y no sobre las disconformidades. Lo que Dios busca en sus siervos es un compromiso y un deseo de servir. Un Absalón no tiene deseos de servir, sino de ser servido; aparenta servir, pero en realidad quiere ser servido; quiere levantarse, y tener "renombre".

Muchísimas personas están dispuestas a seguir un "evangelio" que no le exige ningún compromiso. "A mi que no me vengan con diezmos, son servicios, con ir a evangelizar a la plaza, con ayunos y vigilias...¡No!, yo asisto a tal iglesia porque allí no me piden nada". Pero una iglesia sana se edifica sobre el servicio, sobre el querer dar. Se edifica sobre el compromiso con el Dios Altísimo, con el liderazgo de la iglesia, y como miembro de esa iglesia.

Creo que los creyentes no se dan cuenta del peligro al que se exponen al dejar su compromiso en la obra de Dios. Literalmente se están poniendo sobre una colina y le gritan al Diablo "soy un blanco, pegame donde quieras". Se abren todo al ataque del enemigo contra sus vidas, y luego se preguntan por qué les va mal todo, por qué la depresión, por qué la enfermedad, ¿por qué? ¿por qué?.

NOVENO PASO: Alimenta a sus seguidores con su propio espíritu de crítica y deslealtad

En vez de alimentarlos con la Palabra, los nutre y los alimenta con la deslealtad y con su crítica. "El rey no puede ayudarte, no tiene tiempo". "El pastor no te visita, no se preocupa por ti, yo si". "No se sabe como se maneja el dinero de esta iglesia", etc.

Las sugerencias ya se transforman en acusaciones. Comienza a hablar de las faltas e inconsistencias obvias de todo pastor y liderazgo, pues no se puede esperar de nadie total perfección en todo. Generalmente Absalón comienza con acusaciones que nada tienen que ver con la habilidad del pastor para llevar el liderazgo de una iglesia. Lo que busca un Absalón es hacer notar cosas obvias, para que su seguidores le digan que es la verdad. Alimenta a sus seguidores con su espíritu de crítica, los que por supuesto, ven las cosas obvias y le creen. Así van siguiendo en ese espíritu hasta que también creen otras cosas que no son tan obvias.

DECIMO PASO: decide llevar la conspiración a la acción

Con el aumento de sus seguidores, decide llevar a cabo la acción. Ya ha tenido bastante tiempo para reclutar gente a su lado y en ganar los corazones de muchos para que lo oigan. Ahora dice: "Cuando oigan la trompeta, sabed que el rey vive en Hebrón.....".


Comienza a llevar la conspiración, que hasta ahora ha sido subterránea, a la acción. Y la lleva usualmente con personas inocentes. Absalón llevó a doscientas personas que "no sabían nada", y fueron en su sencillez e inocencia.

DECIMO PRIMER PASO: justifica su rebelión enfatizando los hechos en los cuales no está de acuerdo

Justifica su rebelión sobre "diversas cosas", llega a estar en contra de la predicación, el sistema que se esta empleando,la forma como se están haciendo las cosas, normalmente lo hace sobre asuntos que no tienen mucha importancia, ni sobre pecados fuertes. Sino sobre hechos irrelevantes. Hay iglesias que se han dividido por una simple cuestión, si comprar bancos o sillas. Pues bien, los que quieren bancos se quedan y los que no, se van. Las divisiones vienen por las cosas pequeñas que generalmente un Absalón usa para su bien.

DECIMO SEGUNDO PASO: el Absalón se lleva su grupo y empieza su propio ministerio

Divide la iglesia y el Cuerpo de Cristo, y se lleva a los suyos. Ahora tenemos un nuevo grupo que ha surgido por la deslealtad y la rebelión. No ha nacido por el amor a Dios. Ni ha nacido por un avivamiento, sino ha nacido por deslealtad.

Cada grupo que comienza así tiene una maldición sobre su cabeza, no hay opción. “Si tu has hablado en contra del liderazgo, ¿sabes lo que has hecho en ese instante?, has desatado juicio sobre tu cabeza porque hay una maldición sobre la cabeza del rebelde. Solo puedes tomar una decisión para escapar de esto, arrepiéntete de tu crítica y de tu rebeldía, aunque tengas o no razón. Dios lo estableció así”.

¿Qué pasa con una persona, o con un grupo que funciona en el espíritu de Absalón?

Absalón entró en Jerusalén, y en el palacio. Se acostó con las mujeres del rey, y declaró "soy el rey". El hecho de acostarse con estas concubinas de David, demostró que tenía una mente perversa y lasciva. El consejo de hacerlo vino de Ahitofel, que se presume era el abuelo de Betsabé, con quien David había tenido sus amoríos. Este lamentable hecho demostraba que Absalón se hacía dueño de todo lo que poseía su padre, y que no había más posibilidad de reconciliación entre ambos. Fue como cuando Cortés quemó las naves en el Golfo de Méjico, indicando a sus hombres que no había otra salida que luchar por la causa de la conquista. Sus seguidores estaban convencidos del triunfo: "Miren como Dios ha levantado a Absalón, la presencia de Dios está con él, lo está bendiciendo tremendamente, ésto es realmente de Dios". Pero luego comenzó la batalla, y en ella murieron 20.000 de los rebeldes a manos de los leales. Y no solo eso, sino que Dios mató a más en el bosque de los que mataron David y sus hombres (como cincuenta o sesenta mil hombres).

Absalón se enredó los cabellos en una encina y así quedó suspendido entre el cielo y la tierra, y el mulo en que iba siguió adelante. Su hermosa cabellera que todo Israel admiraba fue su ruina, y 10 hombres de Joab lo mataron.

¿Qué pasa si hemos dado lugar a este espíritu de crítica y rebelión en nuestras vidas?

Si hemos resaltado las fallas del liderazgo ante los ojos de los demás, haz lo siguiente:

1) Decide en tu corazón arrepentirte, y no hables más de otros líderes. Si no puedes levantarlos a los ojos de otros, si no lo puedes exaltar, cállate la boca y no digas nada.

2) Deja de juzgar lo que no te gusta, Dios lo juzgará por los motivos que hay en su corazón. Deja de hablar y de buscar a otros que están disgustados. Ni prestes oído al chismoso o al que se queja. Decide en tu corazón: "si alguien viene a mí en contra de otros, no voy a prestar oído porque no quiero ser parte de ese espíritu de rebelión y de división".

En 1ra Corintios 11:31, se nos dice: "Si pues nos examinásemos a nosotros mismos no seríamos juzgados....".

INTIMIDAD: Profeta James Goll

Las hojas detrás de las que nos escondemos
¿Puede imaginar cuán rápido cambió el clima espiritual después que Adán y Eva conocían a Dios y Él los conocía a ellos? Como resultado de su desobediencia, experimentaron barreras instantáneas para su intimidad con Él. Aparecieron muros. Luego de su caída cosieron hojas de un arbusto cercano y se cubrieron tan rápido como pudieron. Se estaban escondiendo del Señor por primera vez en sus vidas.
Pero Dios, en su búsqueda apasionada, permanecía cerca. Una nueva reacción se agitó dentro de ellos mientras se acercaba. Antes corrían hacia Él cuando oían sus pisadas. Ahora corrían en la dirección opuesta. Antes respondían con gozo: “Padre, ¡eres Tú!”. Pero ahora estaban llenos de temor: “Oh, no. ¡Es el Padre!”.Eran movidos por la culpa. ¡Nunca antes habían tenido esa reacción o ese pensamiento! No conocían la condenación, el temor o la vergüenza. Ahora, como resultado de su desobediencia, corrieron y se escondieron de la voz de Dios (podríamos decir que huían de lo profético).
Obviamente, estas eran hojas reales que recogieron y cosieron para cubrirse. Pero también recogemos y escogemos lugares para ocultarnos y cubrirnos. Desde el momento que elegimos escondernos detrás de nuestras“mentalidades defensivas de hojas de higuera” ante la voz reveladora de Dios, su corazón, sus acciones y su poder, las cosas comienzan a complicarse por demás. ¿Por qué? Porque ahora filtramos automáticamente la voz, la presencia y el poder de Dios a través de esos filtros. Si la palabra de Dios finalmente penetra nuestros corazones y mentes, parece como si se diluyera debido a la racionalización abundante, el escepticismo analítico, las teorías teológicas que niegan los dones o las barreras emocionales tradicionales. Quizá ahora no cosamos hojas de higuera, pero los obstáculos para la comunión sobre nuestros corazones y almas, nos impiden acercarnos a la presencia de Dios.
¿Puedo señalar algunas de las hojas detrás de las cuales nos escondemos? Son progresivas y se acumulan una sobre otra.
El pozo de los sentimientos de culpa

El primer juego de hojas detrás de las que nos escondemos muchos de nosotros es la culpa. Algunos parecen estar allí toda la vida, como un auto que se salió del camino y sigue en la zanja años después. Los actos de pecado y los errores del pasado o el presente están pegados en sus caras, pero en lugar de correr hacia su amado Salvador y admitir su falta, arrancan en la dirección opuesta a esconderse detrás de la oscuridad de la culpa. Este lugar oculto es el terreno para la condenación, la acusación y otras malas actitudes. Pero todo esto se puede anular por la antigua confesión de pecado y la limpieza por la sangre de nuestro Señor Jesucristo.
Existen varias categorías de culpa: culpa real por un pecado real, culpa exagerada por una combinación del pecado real y la obra del “acusador de los hermanos” (Apocalipsis 12:10) y la culpa falsa como resultado de la voz del destructor, desatando condenación y espíritus de mentira (1 Reyes 22:21-23, Juan 8:44, 10:10). Todas estas formas de culpa son muy reales en el mundo de nuestras emociones.
La cura es simple y directa. 1 Juan 1:7 nos presenta el remedio: “… pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado”. Andar en la luz nos mantiene limpios. La palabra del Señor para usted es: “… y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres” (Juan 8:32). El amor que perdona, limpia y sana lo está esperando allí.

La máscara de las heridas del pasado

La segunda capa de hojas que nos esconde del amor de Dios y nos aleja de la intimidad con Él es la máscara religiosa, ocultando las heridas profundas del pasado. Los religiosos usan bien las máscaras, pretendiendo que todo está bien con sus almas cuando tienen al Señor, el mismo Amante de sus vidas, al alcance de sus manos. Nos transformamos en simuladores enmascarados en el desfile de los cristianos hipócritas.
Pero el Jesús real viene para sanar a los quebrantados y libertar a los castigados (Isaías 61:1, Lucas 4:18-19). Jesús es nuestro Sanador. Debemos quitarnos las máscaras y permitirle que meta su mano profundamente para tocar cada fuente de nuestro dolor. Permitámosle probar y aún alcanzar las heridas antiguas para permitir que la luz de su amor penetre nuestro ser, exponiéndolas a la luz. Ríndase y perdone. Siembre bendiciones en otros. Este es el camino para quitarse las máscaras ante Dios, soltando misericordia y perdón sobre las heridas del pasado, permitiéndole a Él que haga lo mismo.

Los observadores de la banca del temor

Consideremos una tercera hilera de camuflaje. Queremos ser parte de las cosas, gozar la vida, ser libres y ser usados por el Señor. Pero nuestras heridas, aumentadas por los ataques del enemigo, nos mantienen en la banca mirando mientras otros se gozan en medio del juego. Nos transformamos en observadores temerosos para correr hacia el campo de juego.
Esta es el área donde tuve que pelear más. ¿Cómo me veré si hago esto? ¿Cómo me verán los demás? ¿Cómo haré para trabajar? Pero si permitimos que el temor al rechazo, el temor a la autoridad o a las opiniones de los demás nos detengan, eventualmente terminaremos tratando de agradar a la gente, dominados por la anticipación de sus opiniones.
Escúcheme en esto: Si Dios puede ayudarme a salir del banco de los espectadores, puede hacerlo con usted. Mi mente estaba dominada por las impresiones acomplejadas que esperaba de los demás. El temor nos paraliza mientras la auténtica fe nos impulsa a avanzar. Debemos tratar con esos temores, llevándolos a la Cruz (Isaías 8:12-13). Sea atrevido como un león por causa de Jesús. ¡Haga algo! Salte de la banca sobre estos espíritus de intimidación (Lucas 10:19) y sea más que un conquistador (Romanos 8:37).
El único remedio es el amor de nuestro Padre. Caliéntese en la luz de su devoción. Pídale al Señor revelación sobre esto, afirmándose en la realidad que “si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” (Romanos 8:31). Él no se limita a tolerarnos. Usted no es un accidente esperando dónde ocurrir. Fue creado a la imagen del Señor y para su placer (Apocalipsis 4:11). Usted es el objeto de su amor consumidor. ¡Esto es revolucionario!

Pánico a las críticas

Hay una cuarta hoja de higuera que usamos para proteger nuestra imagen. Antes de saberlo, no es sólo un espectador sentado en la banca, es el juez de los juegos. Primero desarrolla una cara arrugada, luego comienza a operar desde un espíritu religioso llamado crítica. Tiene diez puntos desde donde juzgará a todos los que lo rodean. Como los jueces en las olimpíadas, califica a cada participante.
Cuando salen de la congregación dicen: “Bueno, hubiera sido mejor si…”. Pero no hace nada para mejorarlo. ¿Por qué debería hacerlo? Ya estuvo allí, lo hizo y aún tiene la camiseta.
Algunos dirán: “Suenas como si escupieras uñas”. Pero se necesita la luz de la verdad para penetrar nuestros escudos protectores. La verdad puede ser dolorosa por el momento, pero cuando se ora y se declara por la motivación del amor, nos limpia y libera. Quizá esté hablando un poco agudo, pero honestamente, quiero que seamos libres de todos los enredos para que Dios pueda guiarnos hacia la revolución profética que viene.

Las fortalezas de las limitaciones impuestas

Esto nos lleva hacia la quinta capa de hojas detrás de la que nos escondemos: las limitaciones impuestas. En esta etapa comenzamos a creer las mentiras ridículas e idiotas que el diablo dice de nosotros y aquellas mentiras que se transforman en fortalezas negativas de la mente (2 Corintios 10:4-6). El enemigo envía palabras que no están alineadas con la voluntad y la Palabra de Dios para atacar nuestras mentes. A veces estos pensamientos aún son plantados por personas en autoridad. Sus efectos nos confinan en cajas con el techo bajo y falsas expectativas. Mientras creemos estos reportes del enemigo o las palabras maldicientes en contra nuestra como “algo que nunca cambiará”, quedamos encerrados en cajas oscuras. Proverbios 23:7 nos recuerda la promesa y el problema: “Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él”.
Ed Silvoso, dice en su libro maravilloso “Para que ninguno se pierda”, nos entrega una buena definición de esas fortalezas espirituales. “Representan una mentalidad impregnada con desesperanza que nos hace aceptar como irremediable las situaciones que sabemos son contrarias a la voluntad de Dios”.
Cuando perdemos la esperanza por las cosas que Dios declara que se pueden cambiar, nos alineamos con los procesos de pensamiento y los planes de las tinieblas para nosotros. En este quinto nivel, atravesamos la realidad de la culpa, las heridas, el temor y la crítica. No debemos permanecer más tiempo fuera de la luz. Nos deprimimos, pensando que no nos acepta, no nos ama o siquiera tiene un plan alternativo para nosotros.
Pero la luz de Dios viene con una invitación a la honestidad y la humildad. Quizá pueda pensar: “Usted quiere decir que puedo verme horrible delante de todos”. No, para nada. Si usted demuestra honestidad y humildad nunca se verá horrible, se verá hermoso, particularmente ante Dios. Él ama al humilde y afligido, haciendo brillar su gracia sobre ellos (Proverbios 3:34, 1 Pedro 5:5). Nada es más hermoso que la gracia de Dios. Mientras permita que haga brillar su gracia sobre usted, también se verá hermoso.
Piense en esto: Dios también ama a los luchadores. Necesita saber que hay momentos donde tendrá que guerrear en el nombre y por la sangre de Jesús para quebrar su caja de limitaciones impuestas y pensamientos negativos. Pero existe un camino y la puerta es la cruz de Cristo.

Intimidad en lo profético

¿Qué hará falta para que surja el cristianismo auténtico, entregado y lleno de poder? Lo profético tiene muchas expresiones como el oficio del profeta, el don de profecía, el vidente, la unción profética, el ministerio profético, sueños y visiones. Hay diferentes modelos que exhiben una variedad de gracias proféticas como los salmistas, administradores, maestros, evangelistas proféticos, etc.
Pero en lugar de definir el don de profecía, quiero tratar el tema de la intimidad en lo profético como se ve en las vidas de Adán y Eva en el Edén, donde caminaban y hablaban con el Señor, oyéndolo y viéndolo. Estaban donde Dios estaba sin esconderse sino desarrollando una comunión íntima con Él. El deseo del Señor es que surja una generación de personas que oigan un sonido del jardín de la comunión con Dios, la voz del Señor.
El aliento íntimo de la vida
A. Génesis 2:7: “Y Dios el Señor formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz hálito de vida, y el hombre se convirtió en un ser viviente”. Así como Adán recibió el aliento de vida, nosotros también somos seres vivientes, mientras el aliento de vida entra en nosotros a través del Espíritu Santo (1 Corintios 12:13).
1. Ahora somos portadores de la presencia de Dios para impartir vida, como lo revelan los siguientes pasajes:
a. Cantares 4:16: “¡Viento del norte, despierta! ¡Viento del sur, ven acá! Soplen en mi jardín; ¡esparzan su fragancia! Que venga mi amado a su jardín y pruebe sus frutos exquisitos”.
b. Génesis 2:24: “Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser”.
2. Estar llenos del aliento de Dios nos afecta. La vida fluye a través de nosotros mientras nos relacionamos con el Señor.
3. La intimidad nace de nuestra relación y comunión tanto con Dios como hacia nuestros hermanos. Ahora podemos conocernos unos a otros en intimidad como la imagen de la unión en un matrimonio.
4. El amor de Dios, el aliento de Dios, fue desde el principio un atributo doble de amor desde y hacia Él. Esto se puede experimentar como una fuente que brota y fluye como los cuatro ríos del Edén.
5. Este amor es profundo y afectuoso, entregado, apasionado y aún puede abrumarnos o superarnos.
a. Cantares 4:9: “Cautivaste mi corazón, hermana y novia mía, con una mirada de tus ojos; con una vuelta de tu collar cautivaste mi corazón”.
b. Cantares 6:4-5: “Tú, amada mía, eres bella… Aparta de mí la mirada, que tus ojos me tienen fascinado…”.
6. Adán y Eva estaban desnudos, no se escondían detrás de nada y no se avergonzaban, se mostraban abiertos, honestos y vulnerable con Dios y entre ellos.
B. Génesis 3:1-13
7. Previamente, todo lo que Adán y Eva conocían era comunión, honestidad, intimidad, oír y correr hacia el sonido del Señor caminando por el Edén.
8. Génesis 3:8-10 retrata, ahora en obediencia, a Adán y Eva escondiéndose temerosos, creando barreras para la intimidad.
9. Su respuesta cambió de correr hacia Dios por alejarse de Él. Ahora se escondían de la presencia del Señor.

Las cuatro preguntas

A. Génesis 3:9
Dios hizo cuatro preguntas para aquellos que se esconden detrás de barreras. Cuanto más nos acerquemos a la luz, más seremos expuestos. Cada nuevo paso de luz revela un nuevo nivel de tinieblas internas. La intimidad en lo profético es estar donde Dios está. ¡No es esconderse de Él sino correr hacia Él!
B. Cuatro preguntas reveladoras
1. Génesis 3:10: ¿Dónde estás? Esta es una invitación a la intimidad.
2. Génesis 3:11: ¿Quién te dijo que estabas desnudo? ¿Quién es tu fuente de información, conocimiento y vida?
3. Génesis 3:11: ¿Comiste del árbol? ¡Honestidad o engaño y rebelión, es su elección!
4. Génesis 3:13: ¿Qué has hecho? Reclama responsabilidad personal. Rechazar el cambio no es la respuesta, aún cuando pueda sentirse herido por su desobediencia o los errores de otros.
Barreras para la intimidad: Tentaciones mundanas
A. Compare Génesis 3:5-6 con 1 Juan 2:16:
1. Génesis 3:5-6: “…La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que tenía buen aspecto y era deseable para adquirir sabiduría, así que tomó de su fruto y comió…”.
2. 1 Juan 2:16: “Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo”.
3. Vendrán oportunidades y tentaciones. Cuando nos cedemos, crean barreras de auto protección alrededor de nuestra vida.
B. Lujuria de los ojos

1. Nuestros ojos y manos son instrumentos por los cuales el Señor desea moverse. Ceder a las tentaciones (la lujuria de los ojos) pone filtros falsos sobre los ojos y se nublan.
2. La parte vidente de nuestras vidas se pervierte por la lujuria. Se nubla la revelación. Como resultado surge la mezcla.
3. Mateo 5:8 promete: “Dichosos los de corazón limpio, porque ellos verán a Dios”.
C. Lujuria de la carne
1. ¡Necesitamos limpiarnos de la carne! El Salmo 24:3-4 dice: “¿Quién puede subir al monte del Señor? ¿Quién puede estar en su lugar santo? Sólo el de manos limpias y corazón puro, el que no adora ídolos vanos ni jura por dioses falsos”.
2. Nuestras manos en muchas dimensiones representan nuestros cuerpos como instrumentos de bendición (Salmo 26:6 y 1 Timoteo 2:8).
3. ¿Por qué necesitamos limpiar nuestras manos? Los hechos de compasión se realizan por medio de nuestras manos mientras nuestro corazón se purifica por su amor.
a. Santiago 4:8: “… límpiense las manos… purifiquen su corazón”.
b. Tito 2:11-14: “En verdad, Dios ha manifestado a toda la humanidad su gracia, la cual trae salvación y nos enseña a rechazar la impiedad y las pasiones mundanas. Así podremos vivir en este mundo con justicia, piedad y dominio propio, mientras aguardamos la bendita esperanza, es decir, la gloriosa venida de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo. Él se entregó por nosotros para rescatarnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo elegido, dedicado a hacer el bien”.
c. Romanos 6:11-13: “De la misma manera, también ustedes considérense muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús. Por lo tanto, no permitan ustedes que el pecado reine en su cuerpo mortal, ni obedezcan a sus malos deseos. No ofrezcan los miembros de su cuerpo al pecado como instrumentos de injusticia; al contrario, ofrézcanse más bien a Dios como quienes han vuelto de la muerte a la vida, presentando los miembros de su cuerpo como instrumentos de justicia”.
4. Dios desea soltar su impartición y el poder de su presencia a través de nuestras manos (Habacuc 3:4). Las manos limpias nos permiten impartir la bendición hacia otros, incluyendo a los que nos rodean.
D. El orgullo de la vida
1. En un sentido, esta es la adoración de uno mismo. Aquí nos comparamos con otros y adoptamos una falsa escala de valores. Dios se entrona en las alabanzas de su pueblo (Salmo 22:3). Donde se establece un trono sobre una persona, una casa o una ciudad, allí desciende Dios. En su presencia puede verlo, sentirlo, tocarlo, oírlo y oler el aroma de su perfume.

E. ¿Por qué Dios hace esta pregunta?

1. Cada pregunta que hace Dios es una invitación a la intimidad, el diálogo y la comunión. Una invitación a salir de lo oculto e ir hacia el lugar transparente de luz, verdad y honestidad.
Isaías 1:18 dice: “Vengan, pongamos las cosas en claro…”. Una vez más, surge una invitación para liberarnos de las hojas de higuera que nos impiden un diálogo transparente y honesto.
2. Dios desea y comienza la intimidad por nosotros para que podamos salir del escondite. Sabe que tenemos temor. ¿Dónde está?
3. ¿Nos estamos presentando como una invitación para otros? ¿Tememos ser expuestos? ¿Estamos en condenación o estamos abrazando el amor?
4. Estas preguntas tienen el propósito, como ocurrió con Adán y Eva, de hacer regresarnos al lugar donde caminamos con Dios en intimidad y donde Él camina y habla con nosotros.

Algunas de las hojas detrás de las que nos escondemos
A. Culpa y vergüenza

El Señor nos limpiará de esto (Juan 16:8-11) a través del poder de la cruz y la sangre de Jesús derramada por nosotros.
B. Heridas
Las heridas son barreras para la intimidad. Uno de los puntos para sanar las heridas es el perdón que nos devuelve las relaciones confiables y vulnerables.
C. Temor a la autoridad, la intimidación y el rechazo
1 Juan 4:18 dice: “En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor”.
D. Ignorancia
Oseas 4:6 dice: “… pues por falta de conocimiento mi pueblo ha sido destruido”. Salir de las sombras de la ignorancia, cultivar la búsqueda y entregarnos a la enseñanza y el estudio para ser aprobados.
E. Barreras y límites auto impuestos
Aquí es donde nos alineamos con los pensamientos y planes de las tinieblas. Necesitamos quebrar estas maldiciones y poderes de las tinieblas en el nombre de Jesús.
F. Moldes o yugos
Son maneras de pensar, estereotipos o fortalezas de pensamientos que nos encierran en una caja. Debemos aprender las lecciones de derribar estas fortalezas y llevarlas en obediencia a Cristo (2 Corintios 10:3-5).
Claves para recibir del Señor
A. Descanse alrededor del Arca
¿Dónde vino la voz de Dios sobre Samuel? Alrededor del Arca, el lugar de su presencia. Ocurrirá lo mismo con nosotros. ¡Debemos aprender el valor y la necesidad del descanso!
1 Samuel 3:3-4 dice: “Samuel dormía en el santuario, donde se encontraba el arca de Dios. La lámpara de Dios todavía estaba encendida. El Señor llamó a Samuel y éste respondió: Aquí estoy”.
B. Ame la misericordia
La misericordia es una realidad del corazón. Si no la tenemos, juzgaremos por las apariencias y opiniones externas, en lugar de hacerlo por el Espíritu (Tito 3:4-7 y 1 Samuel 16:7).
Miqueas 6:8 debe ser nuestra meta: “¡Ya se te ha declarado lo que es bueno! Ya se te ha dicho lo que de ti espera el Señor: Practicar la justicia, amar la misericordia y humillarte ante tu Dios”.
C. Ore en el Espíritu
Se soltará una revelación fresco mientras se edifica y carga sus baterías con la fe en el Espíritu Santo.
D. Aprendiendo y oyendo
La clave para aprender es pedir. La clave para recibir es oír. Debe cuidarse de quedar fijo en la revelación. Daniel 7:1-14 muestra un principio vital de la profecía. Puede mantenerse buscando y pidiéndole al Señor que le revele toda la verdad sin quedarse atrapado en una revelación en particular.
E. Guarde un secreto
Todo lo que reciba como revelación no le da licencia para compartirlo. Dios les revela los secretos a sus siervos (Amós 3:7), pero debemos pedirle permiso al Señor para compartirla o no. Dios está buscando amigos íntimos con quienes compartir sus secretos.
F. Ame la unción
Ame la presencia manifiesta del Señor (1 Juan 2:27). Cultive su presencia rodeándose de gente que viva en su presencia.
G. ¡Arriésguese!
El fruto nace de la rama, debemos salir de nuestra zona de seguridad y afirmarnos en fe. Recuerde, la fe siempre se deletrea como riesgo (Romanos 10:17 y Hebreos 4:2, 11:6).
Conclusión
El primer “tome y coma” nació de satanás, pero el siguiente nació de Jesús cuando les habló a sus discípulos. Jesús desea restaurar la comunión y la intimidad con Dios y con los demás. Jesús nos dice que tomemos y comamos su sangre y su Cuerpo (Juan 6:35, 53-58). Sí, afirmémonos en el lugar de la “intimidad con Jesús” y la “comunión con nuestro Padre”, mientras amamos la “presencia manifiesta del Espíritu Santo”. Este es el fundamento apropiado de toda la vida y ministerio, la piedra angular de la efectividad profética:La intimidad con Dios.
Ore esto conmigo:
eagle_fly_cloud_md_wht.gif (25856 bytes)“Anhelo la amistad, más que los dones. Más que un ministerio ante los hombres, deseo una historia contigo, Señor. Identifica en mi vida las barreras de la intimidad, las hojas detrás de las que me escondo y límpiame con la sangre poderosa de Cristo. ¡Gracias Padre! ¡Eres mi deleite! Amén”.
¡Bendiciones en su jornada!
James W. Goll