BASTA YA DE ROBAR POR PREDICAR. ¿Ladrones en las iglesias? ¿Ministros cristianos cobrando, imponiendo un precio por predicar? Esto más que una violación al mandamiento bíblico, es un robo a la iglesia de Cristo y un abuso contra la verdadera necesidad del pueblo.
Desgraciadamente, así como los hubieron en la época de Cristo, también los hay hoy día. Lobos rapaces vestidos de ovejas. ¿Se imagina a los apóstoles del Señor cobrando por predicar o a Cristo exigiendo dinero a cambio de favores? ¿Se imagina usted a Moisés exigiendo dinero al pueblo de Israel para revelar el mensaje que tuvo de Dios? o ¿al profeta Jonás dirigiéndose al rey de Nínive cobrándole cierta cantidad de dinero para darle el mensaje que Dios le dijo? Amados, definitivamente NO.
La falta de valores y la codicia al dinero ha llevado a muchos ministros hoy día a pensar que los fondos internos de la iglesia son una fuente para enriquecerse. Por eso se inventaron pretextos, excusas y reglas contrarias a las leyes bíblicas, para ellos utilizar de forma abusiva y arbitraria los recursos del pueblo de Dios, socavando no solo el testimonio de la iglesia, sino que también sobrecargando las finanzas que pudieran ser usadas para los más necesitados, concediéndose ellos lujos y riquezas personales. Este proceder fraudulento ocurre en la gran mayoría de los concilios y denominaciones cristianas, que permiten que ministros sin escrúpulos demanden desde los altares cantidades de dinero a cambio de predicar. El problema que afrontamos es que se ha perdido la honestidad en tales predicadores. La iglesia del Señor, tenemos que públicamente y sin miedo, repudiar esta practica indebida. De lo contrario, callar nos hace cómplices de la corrupción, debemos deshacernos de las malas practicas si queremos mantener la integridad de la iglesia ante el mundo. No puede haber impunidad para quienes han causado tanta vergüenza dejando en segundo plano la verdad bíblica.
En ninguna parte en la Biblia se permite o es legal el que se imponga un precio cobrando dinero o posesiones a cambio de favores divinos, esto solo se evidencia en los profetas corruptos que sí mantenían dicha practica (1 S.2; Hch.8:20). Y esto no es algo nuevo. En apocalipsis. 2:14, Cristo condena la doctrina de Balaam, doctrina que se introdujo en la iglesia de Pérgamo, arrastrando a muchos creyentes y ministros a la codicia material y a la fornicación. Balaam era un profeta que comercializaba con la fe, y un perverso que indujo al pueblo de Dios a la fornicación. El codicioso Balaam llegó a cobrar dinero y favores por su don profético. Dios le estorbó en el camino con una mula que le habló con voz de hombre, pero ni que con eso Balaam entro en razón, ni se arrepintió de su avaricia y rebelión (Num.22,23; 31.16)
Según el mandato bíblico, todo servicio y obra del evangelio debe ser ofrecida gratuitamente al público. Por favor, lea bien lo que nos dice la Palabra de Dios en 1 Corintios 9:4-18: " ¿Acaso no tenemos derecho de comer y beber? ¿O sólo yo y Bernabé no tenemos derecho de no trabajar? ¿Quién fue jamás soldado a sus propias expensas? ¿Quién planta viña y no come de su fruto? ¿O quién apacienta el rebaño y no toma de la leche del rebaño? ¿Digo esto sólo como hombre? ¿No dice esto también la ley? Porque en la ley de Moisés está escrito: No pondrás bozal al buey que trilla. ¿Tiene Dios cuidado de los bueyes, o lo dice enteramente por nosotros? Pues por nosotros se escribió; porque con esperanza debe arar el que ara, y el que trilla, con esperanza de recibir del fruto. Si nosotros sembramos entre vosotros lo espiritual, ¿es gran cosa si segáremos de vosotros lo material? Si otros participan de este derecho sobre vosotros, ¿cuánto más nosotros?... ¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del templo, y que los que sirven al altar, del altar participan? Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio. ¿Cuál, pues, es mi galardón? Que predicando el evangelio, presente gratuitamente el evangelio de Cristo, para no abusar de mi derecho en el evangelio...".
En los versículos anteriores el apóstol Pablo hace mención a la ley del Antiguo testamento "Deuteronomio 25.4, cito: "No pondrás bozal al buey cuando trillare" El principio en dicho pasaje señala que el animal que trabaja tiene el derecho a alimentarse y a sustentarse. Debe tener la libertad y las condiciones adecuadas para poder ejercer su derecho a la vida, a su alimentación, sustento y compensación.
A los sacerdotes y levitas que servían en el templo, les estaba prohibido cobrar, o sea, imponer un precio a conveniencia por su servicio (1 Samuel.2:12-17), más bien ellos tenían como derecho a vivir de las ofrendas que Dios ordeno en su pueblo, esto de forma voluntaria y alegre:
-Éxodo 35:22 "Vinieron así hombres como mujeres, todos los voluntarios de corazón, y trajeron cadenas y zarcillos, anillos y brazaletes y toda clase de joyas de oro; y todos presentaban ofrenda de oro a Elohim.
-Éxodo 35;29 "De los hijos de Israel, así hombres como mujeres, todos los que tuvieron corazón voluntario para traer para toda la obra, que Elohim había mandado por medio de Moisés que hiciesen, trajeron ofrenda voluntaria a Elohim".
Levitico.22:18 "...Cualquier varón de la casa de Israel, o de los extranjeros en Israel, que ofreciere su ofrenda en pago de sus votos, o como ofrendas voluntarias ofrecidas en holocausto a Elohim..."
-Numeros.29:39 "Estas cosas ofreceréis a Elohim en vuestras fiestas solemnes, además de vuestros votos, y de vuestras ofrendas voluntarias, para vuestros holocaustos, y para vuestras ofrendas, y para vuestras libaciones, y para vuestras ofrendas de paz".
En ese sentido, el apóstol Pablo declaró respecto a la ofrenda de los santos: "Cada uno dé como propuso en su corazón, no con tristeza, ni por necesidad, por que Dios ama al dador alegre (2 Cor.9:7). Esto es distinto a imponer una cantidad determinada de dinero o posesiones como algunos corruptos hacen hoy.
Dios dispuso que mediante las ofrendas del pueblo se sustente a los ministerios y todo lo relacionado con su obra: "¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del templo, y que los que sirven al altar, del altar participan?". "Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla; y: Digno es el obrero de su salario” (1 Timoteo 5.17-18). Note, que el derecho de los ministros de vivir del altar es mediante las ofrendas voluntarias que Dios dispuso en el pueblo, y no mediante imposición de un precio o pago determinado.
El mismo principio aparece en el Nuevo Testamento. Cristo ordenó a los que anuncian el evangelio que lo presenten de forma gratuita y así vivan del evangelio, de toda ofrenda del pueblo: "A estos doce envió Jesús, y les dio instrucciones, diciendo... Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia. No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos; ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento (Mateo.10:6-10). Den de gratis lo que de gratis recibieron. Aquí el Señor nos enseña a cuando de gracia damos, somos dignos a volver a recibir de gracia. El dar implica reconocer que Dios tiene el control de nuestra economía y no hay que temer por nuestro sustento. Lucas 6:38 dice: “Dad y se os dará…” El dar es el fruto de nuestra confianza en Dios y del uso de nuestras posesiones. Cuando uno da gratuitamente libra su corazón del pecado de la avaricia, y recibe bendición de Dios. No es lo mismo cobrar imponiendo un precio, a vivir de la ofrenda del pueblo.
Cantidad de ministros que antes predicaban la santidad y de la venida de Cristo, hoy se han extraviado de la fe, vendiendo el evangelio para seguir el camino de Balaam (2 P.2:16). Muchos pastores, profetas, cantantes y evangelista desde los púlpitos exigen dinero, dinero y más dinero, y no para suplir sus necesidades básicas como Dios manda, sino que ahora cobran por predicar para vivir con lujos y tener una vida material ostentosa a costa del esfuerzo y el trabajo de otros. Ministros que usan el ministerio como un trampolín para enriquecerse, y con el dinero del pueblo, ostentan: "Mercedes Benz", "Lexus", "Bmw", "Gucci", "Rolex", "Hoteles de 5 estrellas", "casas costosas" y todo tipo de lujos.
¿Acaso Jesús cobraba dinero por hacer milagros o pedía limosnas a cambio de bendiciones? De ninguna manera, la verdad es que Jesús vivió de las ofrendas humildes y voluntarias del pueblo, jamás cobró ni exigió dinero alguno a cambio del don divino (Mt.27:55; Mr.10:45; 15:41). Jesús siempre decía: "Hijo, tú fe te ha salvado", y "conforme a tu fe será hecho". Porque el evangelio y las bendiciones, Dios las dio a su pueblo gratuitamente mediante la fe y la obediencia. Pero hoy muchos ministros corruptos, dicen: "Hijo, tú dinero te ha salvado", "Hijo, conforme a tú billetera será hecho". Ministros hoy se pasan pidiendo grandes sumas de dinero a cambio de milagros, sanidades y favores divinos, y dices al pobre: "Ven pacta con Dios", " Ven trae tu semilla", "ven y siembra". Hablan de cosechar cuando los únicos que cosechan aquí son ellos pero con el dinero del pueblo. Como si Dios se vendiera por dinero, como si el don divino estuviera a la venta o se pudiera comprar con un pacto. "Tú dinero perezca contigo, le dijo Pedro a Simón el mago (Hch.8:20).
La Biblia dice en 1 Timoteo.6:9-10: Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición. Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe..."
Por Michael Garcia Del Valle. Paz y Salud.