La oración que Nehemías hizo al enterarse de la situación por la cual Jerusalén estaba pasando, es un ejemplo de gran ayuda.
¿Cuál es tu mayor logro en la vida? Nehemías era un judío nacido en la cautividad, pero fue utilizado por Dios para liderar a su pueblo en Jerusalén.
Para hacer grandes hazañas para él. Nememías era el copero de Artajerjes, rey de Persia.
Cuando Nememías se enteró que el muro de Jerusalén había sido derribado, inmediatamente cayó sobre sus rodillas llorando. Como judío su corazón estaba en Jersalén.
Pero un aspecto que sobresale y que puede servir de ejemplo; es que Nememías inmediatamente oró y preguntó a Dios qué hacer.
Su oración consta de cuatro partes:
Adoración: Nehemías 1:5-6a
"Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos; esté ahora atento tu oído y abiertos tus ojos para oir la oración de tu siervo, que hago ahora delante de ti día y noche, por los hijos de Israel tus siervos..."
Confesión: Nehemías 1:6b-7
"...Y confieso los pecados de los hijos de Israel que hemos cometido contra ti; si, yo y la casa de mi padre hemos pecado. En extremo nos hemos corrompido contra ti, y no hemos guardado los mandamientos, estatutos y preceptos que diste a Moisés tu siervo."
Agradecimiento: Nehemías 1:8-10
"Acuérdate ahora de la palabra que diste a Moisés tu siervo, diciendo: Si vosotros pecareis, yo os dispersaré por los pueblos; pero si volviereis a mí, y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, aunque vuestra dispersión fuere hasta el extremo de los cielos, de allí os recogeré, y os traeré al lugar que escogí para hacer habitar allí mi nombre. Ellos, pues, son tus sievos y tu pueblo, los cuales redimiste con tu gran poder, y con tu mano poderosa"
Súplica: Nehemías 1:11
"Te ruego, oh Jehová, esté ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre; concede ahora buen éxito a tu siervo, concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servía de copero al rey."
Muchas veces en nuestras oraciones son solo para pedir, pedir y pedir, afortunadamente tenemos un Dios que no se cansa de bendecirnos; pero la oración no solo sirve para pedir sino para alabar a Dios, interceder por otros y hablar intimamente con Dios.
La oración de Nehemías es un buen patrón para que lo utilicemos. ¿Cómo puedes utilizar el resumen de la oración de Nehemías en tu diaria convivencia con Dios?.
