“Vino, pues, palabra de Jehová a mí, diciendo:
Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones.
Y yo dije: ¡Ah! ¡ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño.
Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande.
No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová.
Y extendió Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto mis palabras en tu boca.
Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar”.Jeremías 1:4-10 La experiencia que rodea el llamado del Profeta Jeremías nos da una buena medida de revelación de lo que realmente debe ser la función, de una nabi o vocero de Dios, Jeremías como vidente, nabi o profeta del Altísimo recibe un gran llamado de Jehová al oficio del Profeta. Este Ministerio es diseñado por El específicamente para:
Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones.
Y yo dije: ¡Ah! ¡ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño.
Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande.
No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová.
Y extendió Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto mis palabras en tu boca.
Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar”.Jeremías 1:4-10 La experiencia que rodea el llamado del Profeta Jeremías nos da una buena medida de revelación de lo que realmente debe ser la función, de una nabi o vocero de Dios, Jeremías como vidente, nabi o profeta del Altísimo recibe un gran llamado de Jehová al oficio del Profeta. Este Ministerio es diseñado por El específicamente para:
Arrancar
Derribar
Destruir
Demoler
Construir
Plantar
Profetizar
Ejercer autoridad
Los Profetas son constructores de escenarios proféticos
Todo aquel que alguna vez participó de un proyecto de construcción ya sea una casa, un edificio o una plataforma para cruzada evangelística o actividad musical, sabe que muchas veces hay que limpiar el terreno y prepararlo para lo que debe ser levantado. En determinados momentos, se deberá arrancar árboles, plantas o alguna cosa construida en el lugar elegido que ya no hace más que estorbar a la edificación del nuevo diseño a construir. A veces, tendremos que demoler algo, o destruirlo o derribarlo para quitar estorbos de la zona.La meta u objetivo final es plantar, construir y edificar algo concreto, pero precisamente hay que arrancar, derribar o demoler los impedimentos a la nueva construcción.La tarea de un Profeta verdadero es establecer los diseños y planos del Eterno, siguiendo Sus diseños y edificar el “escenario profético” para una determinada región, le toca al Profeta, derribar algo, demolerlo o destruirlo para preparar el territorio para la edificación de la plataforma de avivamiento planificada por el Señor.Es a través de la profecía que el Profeta, arranca, derribar, demuele o destruye lo que impide ver la Gloria del Señor en una nación. Es a través de la palabra profética del Espíritu (Rhema) que el Profeta también planta, construye y edifica el “escenario profético generacional”. Profetas y profecía son los recursos divinos de Jehová para preparar el terreno donde edificará Su Obra y Sus “escenarios proféticos”. ¡Gloria al Señor!“Palabra de Jehová que vino a Jeremías, diciendo:
Ponte a la puerta de la casa de Jehová, y proclama allí esta palabra, y di: Oíd palabra de Jehová, todo Judá, los que entráis por estas puertas para adorar a Jehová.
Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Mejorad vuestros caminos y vuestras obras, y os haré morar en este lugar.
No fiéis en palabras de mentira, diciendo: Templo de Jehová, templo de Jehová, templo de Jehová es este.
Pero si mejorareis cumplidamente vuestros caminos y vuestras obras; si con verdad hiciereis justicia entre el hombre y su prójimo, y no oprimiereis al extranjero, al huérfano y a la viuda, ni en este lugar derramareis la sangre inocente, ni anduviereis en pos de dioses ajenos para mal vuestro, os haré morar en este lugar, en la tierra que di a vuestros padres para siempre”.Jeremías 7:1-7
Ponte a la puerta de la casa de Jehová, y proclama allí esta palabra, y di: Oíd palabra de Jehová, todo Judá, los que entráis por estas puertas para adorar a Jehová.
Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Mejorad vuestros caminos y vuestras obras, y os haré morar en este lugar.
No fiéis en palabras de mentira, diciendo: Templo de Jehová, templo de Jehová, templo de Jehová es este.
Pero si mejorareis cumplidamente vuestros caminos y vuestras obras; si con verdad hiciereis justicia entre el hombre y su prójimo, y no oprimiereis al extranjero, al huérfano y a la viuda, ni en este lugar derramareis la sangre inocente, ni anduviereis en pos de dioses ajenos para mal vuestro, os haré morar en este lugar, en la tierra que di a vuestros padres para siempre”.Jeremías 7:1-7
Es menester recordar lo que he señalado en capítulos anteriores a la hora de profetizar, aunque en este bendito oficio profético nos tocará muchas veces profetizar palabras duras que derribarán o demolerán algo para luego poder limpiar y edificar, debemos hacerlo con compasión y misericordia.Debemos ejercer el oficio profético con el mismo amor y carga compasiva de Jesucristo. Ese es el espíritu correcto de la profecía. Las profecías son las piezas que unen el escenario profético.
Naciones hombres y familias son el resultado de diversas profecías habladas por los Profetas de Dios en diferente tiempo y lugar sobre esos territorios, familias y seres humanos. Las profecías y visiones del Señor expresan Sus diseños, planes, tiempos y propósitos con pueblos y territorios. Profecía es la revelación del Plan Divino y la parte del mismo que le concierne a determinadas regiones y personas. Profecía declara la intención constructiva de Jehová, hablando con respecto al carácter y vida de hombres y países. Profecía es la “sustancia de Dios”, es lo esencial de los diseños secretos del Padre, que nos son revelados por Su soberana determinación. Las profecías son las piezas de un escenario cual tablones de una plataforma teatral que se unen entre sí por la unción, los propósitos y los Ministerios asignados a trabajar en y con ese lugar determinado.Sin duda alguna, en el área de la edificación y establecimiento por el Espíritu Santo de los “escenarios o plataformas proféticas regionales”, los Profetas y las profecías de Dios, juegan un papel importantísimo, direccional y determinante. ¡Señor, gracias por hacer emerger hoy a tus Profetas y Tus profecías. Amén! “El potencial de la profecía del Espíritu Santo” “Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bienen estar atentos como a una antorchaque alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones;
entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada,
porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaronsiendo inspirados por el Espíritu Santo”.2 Pedro 1:19-21 A partir del libro del Génesis en el Antiguo Testamento encontramos de manera el término “palabra” relacionado con “dijo Dios”. Esta expresión indica que el Altísimo habló Su “palabra creativa” y ésta produjo lo que Él determinó que sería: “Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz”.Génesis 1:3La expresión “dijo Dios” es un sinónimo de Dios habló, Jehová dio o dijo la Palabra. Esta expresión viene del hebreo “dabar” (davar) el cual está íntimamente ligado a “profecía”. Para el pueblo judío la “Palabra profética o dabar” estaba inherentemente relacionada con los hechos específicos necesarios para su cumplimiento; esto significa que “la profecía o dabar” tenía implícito en sí misma no sólo el anuncio profético sino también el poder divino para provocar los hechos o eventos necesarios para que el mensaje profético fuese cumplido. Según el Antiguo Testamento, la profecía era una “entidad viviente”; tenía vida en sí misma por venir de la boca de Dios y un poder sobrenatural capaz de hacer lo necesario para que lo anunciado por el Señor se cumpliese. La profecía tenía ineludiblemente el poder divino dentro de sí misma para producir su cumplimiento. Aleluya! “Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come,
así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié”.Isaías 55:10-11 Para los patriarcas y la nación judía ,la profecía contenía “el poder creativo” de Jehová para crear y hacer existir lo que no existía y que aun no se veía ;ellos lo expresaban en su lenguaje. Los verbos hebreos indican acción,dinamismo y movimiento creativo. La palabra “dabar o profecía” de Dios implicaba todo un proceso que debía cumplirse plenamente desde que salía la profecía; este consistía en:1-Palabra hablada (el origen).2-Palabra activa (hechos produciéndose).3-Palabra realizada (cumplimiento total). Para los antiguos servidores de Jehová, la profecía era la palabra hablada de Dios y el origen de un proceso con muchos hechos secuenciales que confirmarían que realmente el Profeta habló de parte del Eterno. Ellos esperaban hechos, cumplimiento con acontecimientos concretos, no solo palabras.Los patriarcas entendían que la profecía tenía la investidura de Dios y era una manifestación de Su poder infinito así como una revelación de Su esencia y naturaleza; juzgaban a los Profetas no sólo por las palabras sino por sobre todo, por el cumplimiento de lo que hablaban. Si profetizaban y no se cumplía lo dicho, ellos eran tenidos por falsos profetas. Hoy es imperativo en la Iglesia de Cristo el levantamiento de Profetas verdaderos que garanticen la pureza de la profecía del Altísimo. El Logos de Dios “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Este era en el principio con Dios.
Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres”. Juan 1:1-4 El Nuevo Testamento fue escrito en griego y dos son los vocablos griegos allí utilizados que se traducen al español como Palabra (o Verbo): la palabra Logos y la palabra Rhema, de manera que cuando aparezca una de estas dos en la Escritura , así se traducirá en español;mas no tienen el mismo significado.Juan nos da una clave para el significado del término Logos.En Juan 1:1 el apóstol nos define Logos como Verbo, esta es la traducción mejor para definir a la palabra decretada y activa para ser escrita. Es la palabra revelada y se relaciona más con la Palabra escrita de Dios aunque esté íntimamente relacionada con la revelación del Todopoderoso que está viva y activa; es verbo, es acción y produce acción, pero se relaciona más con la Palabra de Dios revelada a Sus profetas para ser escrita y leída. Es el Logos de Dios.Su poder opera en el Logos al leerla, estudiarla y repetirla; no puedes añadir más a ésta o quitarle algo. Toda otra revelación extrabíblica debe ser medida, analizada y pesada a la luz del Logos, la Palabra escrita de Dios. Es el Logos la palabra revelada al hombre, es Su Plan descubierto para el género humano; no puede ser cambiada ni alterada de ninguna forma. Es la Palabra, el Verbo, el Logos de Dios; la Biblia, el Plan revelado para la redención del hombre. Amén.En el principio era el Logos, el Verbo, la Palabra de Dios. Amén. El Rhema de DiosRhema se traduce también como palabra, pero no se relaciona tanto con el concepto de” palabra escrita revelada” como ocurre con el Logos. El Rhema es la palabra de Dios revelada, vivificada por el Espíritu para un tiempo,persona y situación específica. Está respaldada por el Logos, es decir, por la palabra escrita, pero es la palabra que el Espíritu revela en un momento determinado y opera solo para ese tiempo,persona y circunstancia específica. Es la palabra profética que traída por Dios a los que profetizan; trae respuestas y soluciones para tiempos y situaciones concretas. Opera en el tiempo Kairos de Dios (tiempo profético del Espíritu) y para aquellos a quienes les es revelada.El Logos es la palabra revelada para ser escrita y leída; es permanente y es invariable. El Rhema es la palabra revelada para ser obedecida y opera para el momento o circunstancia para la cual es desatada.La palabra escrita debe ser nuestra base de fe y conducta; debemos leerla, estudiarla y repetirla constantemente. Mas el Apóstol Pablo habla a los colosenses sobre la importancia de tener en abundancia en nuestros espíritus los Rhemas de Dios; esto es, la palabra profética del Espíritu para cada persona y circunstancia.Los Rhemas de Dios son la respuesta divina para las crisis de los hombres y naciones. Un ministro, Profeta o congregación lleno de “Rhemas” transformará con poder a los territorios o naciones a los cuales es enviado a profetizar. “La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales”.Colonsenses 3:16 Pablo el Apóstol señala y exhorta que debe morar en la Iglesia en abundancia la palabra o Rhema de Cristo. Esto solo sucede cuando la Iglesia y sus ministros están activados proféticamente. Amén.
entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada,
porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaronsiendo inspirados por el Espíritu Santo”.2 Pedro 1:19-21 A partir del libro del Génesis en el Antiguo Testamento encontramos de manera el término “palabra” relacionado con “dijo Dios”. Esta expresión indica que el Altísimo habló Su “palabra creativa” y ésta produjo lo que Él determinó que sería: “Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz”.Génesis 1:3La expresión “dijo Dios” es un sinónimo de Dios habló, Jehová dio o dijo la Palabra. Esta expresión viene del hebreo “dabar” (davar) el cual está íntimamente ligado a “profecía”. Para el pueblo judío la “Palabra profética o dabar” estaba inherentemente relacionada con los hechos específicos necesarios para su cumplimiento; esto significa que “la profecía o dabar” tenía implícito en sí misma no sólo el anuncio profético sino también el poder divino para provocar los hechos o eventos necesarios para que el mensaje profético fuese cumplido. Según el Antiguo Testamento, la profecía era una “entidad viviente”; tenía vida en sí misma por venir de la boca de Dios y un poder sobrenatural capaz de hacer lo necesario para que lo anunciado por el Señor se cumpliese. La profecía tenía ineludiblemente el poder divino dentro de sí misma para producir su cumplimiento. Aleluya! “Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come,
así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié”.Isaías 55:10-11 Para los patriarcas y la nación judía ,la profecía contenía “el poder creativo” de Jehová para crear y hacer existir lo que no existía y que aun no se veía ;ellos lo expresaban en su lenguaje. Los verbos hebreos indican acción,dinamismo y movimiento creativo. La palabra “dabar o profecía” de Dios implicaba todo un proceso que debía cumplirse plenamente desde que salía la profecía; este consistía en:1-Palabra hablada (el origen).2-Palabra activa (hechos produciéndose).3-Palabra realizada (cumplimiento total). Para los antiguos servidores de Jehová, la profecía era la palabra hablada de Dios y el origen de un proceso con muchos hechos secuenciales que confirmarían que realmente el Profeta habló de parte del Eterno. Ellos esperaban hechos, cumplimiento con acontecimientos concretos, no solo palabras.Los patriarcas entendían que la profecía tenía la investidura de Dios y era una manifestación de Su poder infinito así como una revelación de Su esencia y naturaleza; juzgaban a los Profetas no sólo por las palabras sino por sobre todo, por el cumplimiento de lo que hablaban. Si profetizaban y no se cumplía lo dicho, ellos eran tenidos por falsos profetas. Hoy es imperativo en la Iglesia de Cristo el levantamiento de Profetas verdaderos que garanticen la pureza de la profecía del Altísimo. El Logos de Dios “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.
Este era en el principio con Dios.
Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.
En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres”. Juan 1:1-4 El Nuevo Testamento fue escrito en griego y dos son los vocablos griegos allí utilizados que se traducen al español como Palabra (o Verbo): la palabra Logos y la palabra Rhema, de manera que cuando aparezca una de estas dos en la Escritura , así se traducirá en español;mas no tienen el mismo significado.Juan nos da una clave para el significado del término Logos.En Juan 1:1 el apóstol nos define Logos como Verbo, esta es la traducción mejor para definir a la palabra decretada y activa para ser escrita. Es la palabra revelada y se relaciona más con la Palabra escrita de Dios aunque esté íntimamente relacionada con la revelación del Todopoderoso que está viva y activa; es verbo, es acción y produce acción, pero se relaciona más con la Palabra de Dios revelada a Sus profetas para ser escrita y leída. Es el Logos de Dios.Su poder opera en el Logos al leerla, estudiarla y repetirla; no puedes añadir más a ésta o quitarle algo. Toda otra revelación extrabíblica debe ser medida, analizada y pesada a la luz del Logos, la Palabra escrita de Dios. Es el Logos la palabra revelada al hombre, es Su Plan descubierto para el género humano; no puede ser cambiada ni alterada de ninguna forma. Es la Palabra, el Verbo, el Logos de Dios; la Biblia, el Plan revelado para la redención del hombre. Amén.En el principio era el Logos, el Verbo, la Palabra de Dios. Amén. El Rhema de DiosRhema se traduce también como palabra, pero no se relaciona tanto con el concepto de” palabra escrita revelada” como ocurre con el Logos. El Rhema es la palabra de Dios revelada, vivificada por el Espíritu para un tiempo,persona y situación específica. Está respaldada por el Logos, es decir, por la palabra escrita, pero es la palabra que el Espíritu revela en un momento determinado y opera solo para ese tiempo,persona y circunstancia específica. Es la palabra profética que traída por Dios a los que profetizan; trae respuestas y soluciones para tiempos y situaciones concretas. Opera en el tiempo Kairos de Dios (tiempo profético del Espíritu) y para aquellos a quienes les es revelada.El Logos es la palabra revelada para ser escrita y leída; es permanente y es invariable. El Rhema es la palabra revelada para ser obedecida y opera para el momento o circunstancia para la cual es desatada.La palabra escrita debe ser nuestra base de fe y conducta; debemos leerla, estudiarla y repetirla constantemente. Mas el Apóstol Pablo habla a los colosenses sobre la importancia de tener en abundancia en nuestros espíritus los Rhemas de Dios; esto es, la palabra profética del Espíritu para cada persona y circunstancia.Los Rhemas de Dios son la respuesta divina para las crisis de los hombres y naciones. Un ministro, Profeta o congregación lleno de “Rhemas” transformará con poder a los territorios o naciones a los cuales es enviado a profetizar. “La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales”.Colonsenses 3:16 Pablo el Apóstol señala y exhorta que debe morar en la Iglesia en abundancia la palabra o Rhema de Cristo. Esto solo sucede cuando la Iglesia y sus ministros están activados proféticamente. Amén.
Continuemos orando para que los efectos del Carnaval sean anulados, implementa un Plan de Adoración especialmente del 8 al 12 de Febrero.