¿CÓMO RECIBIMOS DE DIOS?: Profeta Cliff Bell

¿Se requiere un empujón de un ministro y ser lanzado al suelo? ¿Ser ungido con un aceite especial bendecido por su ministro favorito en Israel? ¿Tomar una botella de agua ungida de África? ¿Se requiere soplar un shofar para orar una oración efectiva? ¿Tal vez si cierto ministro ungido y famoso podría hacer una oración por ti? ¿Tal vez si se pudiera dar una ofrenda grande al ministerio del Apóstol Fulano y Mengano?

EL CORAZÓN IDOLATRA DEL HOMBRE SIEMPRE BUSCA AGREGAR UN OBJETO, TALISMÁN O FÓRMULA CON QUE PODAMOS MANIPULAR A DIOS PARA QUE HAGA LO QUE DESEAMOS.

SEGÚN LA BIBLIA ES MUCHO MÁS SENCILLO.

No estoy diciendo que el uso de aceite, un shofar, o el dar ofrendas es algo malo. Puede ser algo muy bueno si Dios te indica hacerlo. El problema que veo es que muchos toman una instrucción específica de Dios para una ocasión y situación en particular y la convierten en una fórmula general por todos. Luego, otros abusan de tales “formulas” para manipular a otros e intentar manipular a Dios. …y tengo un problema grande con los que “venden” lo que Dios ofrece de gracia.

EN REALIDAD LA MANERA QUE RECIBIMOS DE DIOS SIEMPRE ESTÁ FUNDADA SOBRE UNA RELACIÓN CORRECTA CON DIOS, VIVIR EN OBEDIENCIA, Y ORAR LA ORACIÓN DE FE.

Marcos 11:24 nos revela unos de los principios básicos bíblicos de cómo recibir de Dios. «Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.»

Es simplemente una cuestión de pedir de Dios, creer, y recibir por la fe. PERO, SI ME PERMITES, ME GUSTARÍA ANALIZAR ESTO CON UN POCO MÁS PROFUNDIDAD…

La fe es una clave importante. LA FE AUTÉNTICA ES SIEMPRE BASADA SOBRE UNA VERDAD BÍBLICA. Sin ese fundamento bíblico no es la fe, sino presunción. Dios nunca prometió responder a oraciones de presunción. Así que tenemos que pedir a base de una verdad bíblica. De hecho, la fe viene a nuestros corazones a través del oír la Palabra de Dios (Romanos 10:17).

LA FE SE MANIFIESTA EN DOS LUGARES: en nuestro CORAZÓN y en nuestra BOCA. No está en nuestras mentes. La mente solo es un almacén de información. La fe es una operación del corazón (espíritu) del hombre, no de la mente (alma). La mente natural no discierne las cosas del Espíritu de Dios (1ª Corintios 2:14). Pero cuando una verdad bíblica es ILUMINADA POR EL ESPÍRITU SANTO, se convierte en una REVELACIÓN. Esa revelación de verdad bíblica produce la fe cuando llega a nuestro corazón. Y cuando esa revelación bíblica se expresa como una confesión u oración de fe en nuestra boca ¡desata el poder de Dios!

«8 Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos: 9 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. 10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.» Romanos 10:8-10

SI QUIERES MEDIR TU NIVEL DE FE, ESCUCHE UN RATO LO QUE ESTÁ DICIENDO TU BOCA. «Porque de la abundancia del corazón habla la boca.» Mateo 12:34

Cuando la Palabra de Dios es guardada en nuestros corazones puede entonces ser expresada (confesada) con nuestras bocas para establecer la voluntad de Dios. PERO HAY OTRO BENEFICIO DE GUARDAR LA PALABRA DE DIOS EN NUESTROS CORAZONES…

Salmo 119:10-11 dice, «10 Con todo mi corazón te he buscado; No me dejes desviarme de tus mandamientos. 11 EN MI CORAZÓN HE GUARDADO TUS DICHOS, PARA NO PECAR CONTRA TI.»

Guardando la Palabra de Dios en el corazón nos cambia nuestra manera de vivir. De hecho cambia lo que buscamos. En vez de buscar “cosas” de Dios para satisfacer nuestros deseos, comenzamos a buscar la Persona de Dios (“con todo mi corazón te he buscado”). Buscamos el Rostro de Dios en vez de Su Mano.

En realidad esto tiene mucho sentido. No necesito una sanidad, ¡sino el Sanador! No necesito una provisión, ¡sino el Proveedor! Cuando estamos en relación correcta con Dios de Quien desciende toda dádiva buena y perfecta, no tenemos que buscar las cosas (Santiago 1:17),porque ya tenemos a Él.

Cuando buscamos a Dios, a Su Reino y Su justicia, NUESTROS DESEOS CAMBIAN, y por lo tanto, nuestras oraciones cambian.

«Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.» Filipenses 2:13

DIOS BUSCA OPORTUNIDAD DE CONTESTAR LAS ORACIONES CENTRADAS EN SU REINO Y EN LA JUSTICIA. Las “cosas” que necesitamos vienen como una CONSECUENCIA DE BUSCAR LO CORRECTO (Mateo 6:33).

Muchos pidan cosas de Dios sin realmente desear una relación correcta con Él. Le buscan como si fuera un Santa Claus o un genio que podemos manipular a hacer lo que desea nuestra carne. A Dios Le importa que recibamos lo que necesitamos, pero Le importa más nuestra relación con Él que nuestra comodidad natural.

Al conocer la Palabra y la Persona de Dios, y buscar primeramente Su Reino en nuestras vidas, COMENZAMOS A ORAR DE ACUERDO CON SU VOLUNTAD en vez de acuerdo con nuestras pasiones y gustos personales. Comenzamos a orar y actuar para que la voluntad de Dios sea hecha en la tierra así como está en los cielos (2ª Corintios 5:20; Mateo 6:10).

EL ORAR SEGÚN LA VOLUNTAD DE DIOS ES OTRA CLAVE IMPORTANTE…

1ª Juan 5:14-15 dice, «Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa CONFORME A SU VOLUNTAD, él nos oye. 15 Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.»

No vale orar por las cosas mundanas que desea la naturaleza carnal. Santiago 4:3-4 dice: «PEDÍS, Y NO RECIBÍS, PORQUE PEDÍS MAL, para gastar en vuestros deleites. 4 ¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios?» OTRA VEZ VEAMOS QUE LA RELACIÓN CON DIOS ES CLAVE.

Los que están en relación correcta pueden venir confiadamente delante del Trono de la gracia para presentar sus peticiones por medio de nuestro único Mediador entre Dios y los hombres. «Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.» Hebreos 4:16

«Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.» 1ª Timoteo 2:5

Filipenses 4:6-7 «Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, CON ACCIÓN DE GRACIAS. 7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.»

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APLICACIÓN PERSONAL:

¿Cuál he buscado más? ¿a Dios Mismo? ¿o a los beneficios? ¿Su Rosto? ¿o Su Mano?

¿Son mis peticiones ego-céntricas o Cristo-céntricas?

¿He confiado en un objeto o en una persona más que en la Persona y poder de Cristo?

Pida que Dios te revele cualquiera cosa en tu vida que ha creado una división entre tú y Dios que ha quitado tu confianza de poder acercarle. Arrepiéntete de lo que sea necesario.

Arrepiéntete de cualquiera área de egoísmo, idolatría, o de duda, y alinéate con la voluntad de Dios. Cree, recibe y confiesa el amor de Dios por ti.

Dedícate a pasar más tiempo en la Presencia de Dios para conocerle a Él.

Dedícate a pasar más tiempo en Su Palabra para permitir que Su Verdad pueda entrar al corazón. Estudie Su Palabra para aprender cómo es Su Voluntad y cómo son Sus caminos con relación a tus necesidades.

Acércate confiadamente al Trono de gracia. Con acción de gracias y con alabanza presente tus peticiones delante de Él conforme a Su Palabra. Ore y recibe por fe lo que Dios tiene por ti. Si te da alguna instrucción (como perdonarle a alguien, o el hacer un paso de fe) hazlo con todo el corazón.