Esta parece ser una pregunta un poco ingenua lanzada al aire, pero en realidad no lo es. Es más bien una pregunta que atañe a la convivencia social de todas las personas y que de alguna manera se deja pasar, dañando la paz social, familiar y personal, generando en todo caso más violencia que se vuelve incontrolada. De ahí que es bueno considerar este asunto a nivel de la reflexión bíblica. El relato bíblico del Evangelio de Juan empieza con una actitud poco amigable de los judíos:murmuran contra Jesús por el hecho de haber dicho:"Yo soy el pan que descendió del cielo".
Ahora bien, ¿es malo murmurar? ¿qué es la murmuración?
Toda murmuración es una conversación en perjuicio de una persona. Es quejarse entre dientes o en voz baja; es rajar, refunfuñar, criticar o censurar.
Por último, tiene el fin de desacreditar a una persona. ¿Que es lo que pretendían los judíos con respecto a Jesús? Es preciso tomar nota que en la Biblia encontramos muchos casos de murmuraciones. Por ejemplo: el pueblo de Israel murmuró contra Moisés, Aarón y Dios en el desierto( Ex. 15:24; 16:2; Num. 16:41; 14:27); los obreros de la viña contra el padre de familia (Mt. 20:11); contra la mujer que derramó su perfume en la cabeza de Jesús (Mr. 14:5); los escribas y los fariseos contra los discípulos (Luc. 5:30); los griegos contra los judíos (Hech. 6:1). Cabe destacar que en todo momento Dios condena esta actitud negativa y lo considera malo, incorrecto, infraterno, pecado. Jesús mismo advierte a los que murmuran a que no lo sigan haciendo. Pablo, el apóstol, en su carta a los Romanos, en lo referente al listado de pecados que el hombre comete contra Dios, está la murmuración (Ro. 1:30); recomendando no seguir haciéndolo.
Hoy en día es común ver y oír a la gente murmurar, ya esto es parte de la rutina cotidiana entre dos personas o más. La murmuración se practica en el hogar, en el barrio, en el mercado, en la tienda, en la escuela, en el trabajo, en la iglesia, en la televisión, la radio, los periódicos y en cualquier otra parte. Nadie pone ALTO a esta actitud negativa.
Pero alguien seguirá preguntando, ¿qué tiene de malo la práctica de este tipo de conversación?. Bueno, consideremos lo siguiente: en primer lugar, es una ofensa a Dios, porque demostramos falta de amor a nuestro prójimo y eso no es obedecer al Señor con respecto a su mandamiento de amar al prójimo como a nosotros mismos. En segundo lugar, se daña las relaciones personales y de grupo, originando otro tipo de actitudes negativas que conllevan a conflictos y situaciones de violencia. Muchas veces nosotros mismos nos hemos visto envueltos en esta situación: murmurar contra alguien. Nuestra sociedad actual está contaminada por el chisme, la crítica despiadada, la envidia, los rumores, la mentira, las murmuraciones. ¿Cuál es el resultado de todo esto?¡Violencia! Pero esto no es un problema de ahora, antes también lo fue.
Dios quiere que vivamos en paz, en armonía, en alegría, que contagiemos de Su amor y de esperanza a la humanidad entera, que seamos instrumentos de Su paz ahí donde reine el odio y la murmuración. Israel fue castigado por Dios por murar contra él; el apóstol Pablo señala que los murmuradores no merecen vivir. Es por eso que indica que la murmuración es un pecado grave que socava la unidad y la paz. ¿Han visto o escuchado los programas de los medios de comunicación que promueven el chisme, la murmuración? ¿Se han medido sus efectos negativos? ¿Quién detiene esto? ¿Quién asume el precio del desprestigio? Pienso que como cristianos y cristianas tenemos la gran oportunidad de decir ¡Alto! a esta situación a través de nuestro buen testimonio cristiano. Debemos ser ejemplos del amor de Dios y evitar ser instrumentos del ENEMIGO quien es el que siembra en nuestros corazones una actitud infraterna. Es hora de cambiar nuestra manera de conversar y hacer las críticas necesarias, pero teniendo como ingrediente el amor. Que lo que hablemos o conversemos sea algo fructífero en favor de la dignidad humana y de la Misión de la Iglesia del Señor Jesucristo.
. ¿COMO EVITAR CAER EN MURMURACIÓN?
Algunas recomendaciones que nos ayudaran a evitar caer en la murmuración son:
• Ver a las otras personas con ojos de misericordia.
• Huir de los lugares donde se este denigrando a una persona para no formar parte ni directa ni indirectamente de esa murmuración.
• Saber que el sometimiento atrae la bendición.
• Reconocer a quien sirvo y para quien trabajo.
Conclusión:
Las consecuencias de la murmuración a veces son muy duras, es por ello que debemos tratar de evitarla para no caer en este pecado. Dios quiere que seamos Cristianos con manera de hablar intachable, que no exista en nuestra boca palabras que ofenda a nuestro Señor y Salvador. Vivamos de tal manera que toda palabra que de nuestra boca salga sea para Exaltar el Nombre de nuestro Dios.
Pidamos perdón a nuestro Señor si hemos caído en falta y que nos fortalezca para seguir unidos en amor y en paz para seguir anunciándole en el lugar que nos ha tocado vivir. Amén.==CRISTO MENSAJE DE VIDA ETERNA==