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En la sangre de Jesús está contenida toda la autoridad de Dios.
Apoc 1:17b‐18
No temas; yo soy el primero y el último;
Rev 1:18 y el que vivo, y estuve muerto; mas he aquí que vivo por los siglos de los siglos, amén. Y
tengo las llaves de la muerte y del Hades.
Cuando bebemos su sangre, todo nuestro espíritu se va inundando de ese poder y
autoridad gloriosos.
Juan 6:53‐63
Joh 6:53 Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y
bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros.
Joh 6:54 El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día
postrero.
Joh 6:55 Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida.
Joh 6:56 El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él.
Joh 6:57 Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él
también vivirá por mí.
Joh 6:58 Este es el pan que descendió del cielo; no como vuestros padres comieron el maná, y
murieron; el que come de este pan, vivirá eternamente.
Joh 6:59 Estas cosas dijo en la sinagoga, enseñando en Capernaúm.
Joh 6:60 Al oirlas, muchos de sus discípulos dijeron: Dura es esta palabra; ¿quién la puede oír?
Joh 6:61 Sabiendo Jesús en sí mismo que sus discípulos murmuraban de esto, les dijo: ¿Esto os
ofende?
Joh 6:62 ¿Pues qué, si viereis al Hijo del Hombre subir adonde estaba primero?
Joh 6:63 El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he
hablado son espíritu y son vida.
La luz de esa sangre ilumina y abre el reino de Dios ante nosotros, y nos va
transformando cada vez más a Su imagen.
2 Corintios 3:18
2Co 3:18 Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del
Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
No se trata tan solo de proclamar SU sangre, debemos tener una comunión continua
y vigorizante con ella. Hay muchas personas que han sido enseñadas a proclamar el
poder de la sangre, pero no tienen en ellas una experiencia viva con la sangre.
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No es lo que decimos lo que tiene poder, sino desde que posición espiritual lo
decimos. Es la posición espiritual en la que estamos afirmados la que le da sustancia
a nuestras palabras.
‐ La sangre tiene poder para abrir los cielos para que estos sean revelados a los
hijos de Dios. Este poder abre todo lo que obstaculiza la unión de los cielos y la
tierra.
‐ Abre el camino para que todos los diseños de Dios se establezcan sobre la
tierra.
‐ Todo lo que se interponga a la voluntad de Dios, la sangre lo destruirá.
‐ La sangre rasgó el velo del templo y abrió un camino que estaba cerrado entre
Dios y los hombres.
‐ La sangre penetro el infierno, y abrió las puertas del infierno. Las cadenas que
nos ataban se reventaron todas, al paso de Jesús por las regiones del Hades,
los demonios salían expelidos al sentir la potencia de su sangre.
‐ La sangre de Jesús tiene un poder para abrir. Es una llave maestra que abre los
misterios de Dios.
Colosenses 2:2‐3
Col 2:2 Me esfuerzo porque quiero que reciban consuelo y que estén animados y unidos en amor.
Quiero que tengan la sólida convicción que viene del entendimiento para que conozcan muy bien el
plan secreto que Dios les ha descubierto ahora. Ese secreto es Cristo mismo,
Col 2:3 en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento.
LAS SIETE PARTES DE LOS PADECIMIENTOS DE CRISTO
1) La sangre en el sudor de su frente:
‐ Nos da la victoria sobre todos los dolores y sufrimientos del ALMA.
‐ Nos da el poder que somete nuestra voluntad a la voluntad de Dios.
‐ La cruz es el lugar donde 2 voluntades se encuentran y una decide seguir a la otra.
‐ Nos lleva a niveles de intercesión sin precedentes y atraen a los ángeles de Dios a
nuestro encuentro para ayudarnos a morir a nosotros mismos, y a pasar pruebas de
purificación que sin sus ángeles y sin su sangre, nos sería imposible atravesar.
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Lucas 22:42‐44
Luk 22:42 diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la
tuya.
Luk 22:43 Y se le apareció un ángel del cielo para fortalecerle.
Luk 22:44 Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre
que caían hasta la tierra.
2) La sangre que surgió de las bofetadas y los palos que desfiguraron SU rostro:
‐ Nos da la victoria sobre el orgullo, la soberbia y la vanagloria.
‐ Nos rescata del yugo del menosprecio y del rechazo.
‐ Nos da el poder para soportar las burlas y la pérdida de toda reputación.
‐ Destruya nuestra propia belleza para que brille solamente SU hermosura a través de
nuestro ser.
Mateo 26:67‐68
Mat 26:67 Entonces le escupieron en el rostro, y le dieron de puñetazos, y otros le abofeteaban,
Mat 26:68 diciendo: Profetízanos, Cristo, quién es el que te golpeó.
Miqueas 5:1
…Con vara herirán en la mejilla al juez de Israel.
Isaías 52:14
Isa 52:14 Como se asombraron de ti muchos, de tal manera fue desfigurado de los hombres su
parecer, y su hermosura más que la de los hijos de los hombres,
3) La sangre que salió al serle arrancados pedazos de barba:
‐ La barba habla de sacerdocio, así que, a través de esa sangre retomamos el
sacerdocio perdido para poder ministrar delante de su presencia. Es la barba de
Jesús por la cual desciende la unción sobre todo el cuerpo como sucedía con Aarón
el sacerdote.
Salmo 133:2
Psa 133:2 Es como el buen óleo sobre la cabeza,
El cual desciende sobre la barba,
La barba de Aarón,
Y baja hasta el borde de sus vestiduras;
Isaías 50:6
Isa 50:6 Di mi cuerpo a los heridores, y mis mejillas a los que me mesaban la barba; no escondí mi
rostro de injurias y de esputos.
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4) La sangre que salió de los latigazos que desgarraron su espalda:
‐ De esta sangre bebemos la victoria sobre toda enfermedad de nuestro cuerpo físico.
‐ Jesús jamás se enfermó mientras estuvo en la tierra…El fue un hombre sin pecado,
y esto le daba una protección formidable a su cuerpo que el diablo no podía tocar.
‐ Cuando en la cruz, Jesús se cubre de pecado, atrae sobre ÉL toda enfermedad, y la
lleva a la muerte, a través de su propia sangre.
‐ Un cuerpo que continuamente es lavado por la sangre de Jesús, difícilmente se
enfermará.
Isaías 53:4‐5
Isa 53:4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos
por azotado, por herido de Dios y abatido.
Isa 53:5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra
paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
5) La sangre que produjo la corona de espinas:
‐ Esta sangre lo coronó como Rey de reyes y Señor de señores. Le dio toda victoria
contra el imperio del diablo.
‐ Conquistó el gobierno de la tierra y esto nos da a nosotros la posición de reyes y
sacerdotes.
‐ Esta sangre conquistó fortalezas en el mundo espiritual y en la mente del hombre. Al
beber de esta sangre conquistamos nuestra vida de pensamientos para llegar a
tener la mente de Cristo.
‐ De esta manera, a través de la comunión con su sangre, dejamos que ésta penetre
nuestra mente, hasta que literalmente nos convertimos en todo lo que está escrito
que somos.
2 Corintios 10:5
2Co 10:5 derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y
llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,
Mateo 27:29‐30
Mat 27:29 y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una caña en su mano derecha; e
hincando la rodilla delante de él, le escarnecían, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos!
Mat 27:30 Y escupiéndole, tomaban la caña y le golpeaban en la cabeza.
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6) La sangre que salió de las heridas causadas por los clavos:
‐ Esta sangre nos da el triunfo sobre la iniquidad, sobre el pecado, sobre el caminar
torcido y desviado de nuestros pasos.
‐ Esta sangre abre caminos de RECTITUD y restaura las sendas de nuestro destino.
‐ Esta sangre abre las calzadas para llevar el evangelio donde no hay vereda.
Isaías 53:11b
… por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos.
Isaías 59:3ª
Porque vuestras manos están contaminadas de sangre, y vuestros dedos de iniquidad;…
Salmo 58:2b
… Hacéis pesar la violencia de vuestras manos en la tierra.
7) La sangre que salió de su costado al ser atravesado por la lanza:
‐ Esta sangre nos da acceso al lugar santísimo, abre los cielos y nos lleva al interior del
corazón de Dios.
‐ La comunión con la sangre de Jesús nos lleva a conocerlo más íntimamente.
‐ Dios solo le abrirá la intimidad de su corazón a aquellos que él considera su esposa.
‐ Entre los discípulos, Juan tuvo la gracia de llegar a esa profundidad, él amó más que
ninguno d ellos otros….lo siguió hasta la cruz, mientras los demás se escondieron
por miedo…A Juan no le importó el miedo que infundía la guardia romana…sólo
quería estar cerca de su amado.
Juan quería decirle con su presencia y con su mirada: “No estas sólo, yo estoy
contigo hasta el final; y si estar aquí me cuesta la vida, con gusto muero a tu lado”
‐ Muchas personas oyen hablar de la cruz y de todo lo que hay que dejar en ella, y
sienten miedo y dolor, como si algo vital les fuera a ser quitado…Lo que no saben,
es que al dejar lo poco que tenemos, lo corrupto de nuestro ser, las cosas que
amamos en la tierra, estamos entrando al lugar donde todas las cosas son redimidas
y perfeccionadas. Estamos penetrando en las cámaras del Señor, donde nos
fundimos con Dios, donde todo nos es dado.
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CONCLUSIONES:
‐ La sangre de Jesús venció al diablo.
Apocalipsis 12:11
Rev 12:11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del
testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.
‐ La sangre de Jesús HABLA.
La sangre de Jesús le habla de misericordia al Padre, le habla de juicio al diablo
y le habla al creyente de santidad y de justicia.
Hechos 2:42‐43
Act 2:42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el
partimiento del pan y en las oraciones.
Act 2:43 Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los
apóstoles.
‐ La sangre venció la iniquidad, la rebelión y el pecado.
Estos tres son la estructura de poder que el diablo establece dentro del
hombre.
La iniquidad es la raíz del mal, implantada en el hombre, que produce el deseo
de pecar.
El pecado es el fruto que se produce al estar activa la iniquidad.
La rebelión es el poder que alimenta la iniquidad para que ésta esté
continuamente induciendo al hombre a pecar.
La obra completa de la cruz acaba con toda esta estructura de poder
demoniaco.
Isaías 53:5,11b
Isa 53:5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de
nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados… por su conocimiento
justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos.
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‐ La sangre de Jesús arranca a los pecadores del poder del infierno para
llenarlos de su Espíritu, de su Poder y Autoridad y de su Gloria.
Visión de la sangre y el fuego:
Act 2:18 Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis siervas en aquellos días derramaré de mi
Espíritu, y profetizarán.
Act 2:19 Y daré prodigios arriba en el cielo, Y señales abajo en la tierra, Sangre y fuego y
vapor de humo;…
La señal del fuego fue vista cuando descendió sobre los discípulos el Espíritu
Santo en pentecostés pero la sangre y el vapor de humo (nubes de humo) no.
Entonces, estas dos señales están reservadas para que se manifiesten en este
tiempo….La sangre es la revelación del poder y la autoridad de Dios para su
iglesia a través de la sangre del cordero.
El vapor de humo o nubes de humo como aparece en la traducción DHH, nos
habla de su GLORIA….Una manifestación de la gloria de Dios sin precedentes
en la historia de la humanidad.