El orgullo, la arrogancia y la soberbia, se definen en un sólo, espíritu, cuyo nombre es Leviatán. Este espíritu es la raíz de tos los pecados, debido a que fue el pecado que llevó a Satanás a rebelarse en contra de Dios. Una persona que camina con orgullo, puede caer en cualquier pecado. Cada vez que una persona se enorgullece, le recuerda a Dios la rebelión que ocurrió en el cielo. Hoy día, hay un sin número de personas que han caído en pecado y no se han vuelto a levantar por causa del orgullo que anida en su corazón.
Hay palabras sinónimas para referirse al orgullo, tales como soberbia y arrogancia. Y tanto el orgullo, como la soberbia y la arrogancia, son la raíz de todos los pecados. A continuación, estudiaremos cada una de las definiciones de la palabra orgullo sus sinónimos, que nos permitirán entender a profundidad este gran enemigo del ser humano.
Orgullo: Es vivir para uno mismo creyéndose mejor que los demás. Es tener exceso de estimación propia y un sentimiento elevado de la propia dignidad.
Orgulloso: Uno que depende de sus habilidades, de lo que sabe y de lo que ha aprendido. Por esta razón, vive independientemente de Dios y de los demás.
Soberbio: Es aquel que tiene una excesiva estima de sí mismo y menosprecia a los demás. Es uno que se jacta de sus logros pasados y presentes, creyendo que todo lo que ha logrado es gracias a su propia fuerza; por lo tanto, no le da la gloria a Dios. A esto la Biblia le llama "vanagloria de la vida".
Arrogancia: Es la actitud por la cual alguien que se siente superior, menosprecia a los demás; ya sea, por su nivel intelectual, por el color de su piel, por el país de origen o cualquier otra razón que lo haga sentir superior.
Arrogante: Es uno que se atribuye o exagera facultades que no tiene, y expresa en su corazón que lo haría mejor que otros.
¿Cuál es el sentir de Dios hacia una persona que se comporta con arrogancia y soberbia?
Dios la resiste, la rechaza cara a cara, porque Él aborrece el pecado de arrogancia. El orgullo y la soberbia son la misma esencia de la naturaleza diabólica, porque la persona con estas actitudes está negándose a obedecer la autoridad legítima de Dios. Esto, exactamente, es lo que Lucifer hizo cuando habitaba en el cielo. Estudiemos cómo Dios aborrece el orgullo.
"El temor de Jehová es aborrecer el mal: yo aborrezco soberbia, la arrogancia, el mal camino y la boca perversa" Proverbios 8.13 Seis cosas aborrece Jehová, y aun siete le son abominables, los ojos altivos, la lengua mentirosa, las manos que derraman sangre inocente”... “Proverbios 6.16,
¿Cómo se siente Dios cuando actuamos con soberbia?
Es impresionante damos cuenta de que, muchas veces, hemos actuado con orgullo, soberbia y arrogancia, sin darnos cuenta que, con estas actitudes, estamos ultrajando a Dios. En cada persona, existe un nivel de orgullo, y de alguna manera, ha ultrajado a Dios, hiriendo su corazón.
“Pero la persona que haga algo con soberbia, sea el natural o el extranjero, ultraja (reprocha, censura, crítica injuria y blasfema) a Jehová; esa persona será eliminada de en medio de su pueblo”. Números: 15.30
Lo que concluimos de la palabra ultrajar, es que la persona orgullosa levanta el brazo contra Dios y dice: "Dios, yo no te necesito, yo soy autosuficiente para hacer lo que creo que debo hacer"; y esto insulta a Dios. Una persona que tiene esta actitud es alguien que confía en su propio corazón, que no tiene temor de Dios y, tarde o temprano, verá su caída.
Dios abomina toda persona altiva de corazón:
Abominable es para Jehová todo altivo de corazón; ciertamente no quedará impune". Proverbios 16.5
La palabra abominable significa: repugnante, orgulloso, odioso y excesivamente ofensivo. Para Dios, abominable es aquel que se cree superior a los demás, uno que se jacta de sus logros, que menosprecia a los demás, que se atribuye o exagera facultades que no tiene; uno que cree y dice que haría las cosas mejor que los demás, y que vive para sí mismo. Ante los ojos del Señor, todo esto es repugnante y excesivamente ofensivo. ¡Que el Señor nos guarde de la arrogancia!
¿Cuáles son las características de una persona orgullosa, arrogante y soberbia?
Después del pecado de Adán, todos los seres humanos llevamos orgullo en nuestro corazón; algunos tienen más, otros menos, pero todos, sin excepción, cargamos con él. La persona orgullosa es:
Autosuficiente La persona autosuficiente pone su confianza en sus habilidades naturales. No le gusta trabajar en equipo, tiene un espíritu indivi- dualista. El autosuficiente considera que no necesita de los demás y siempre pone una excusa para no trabajar en grupo. Es un individuo que vive independientemente de Dios.
Perfeccionista El perfeccionismo es uno de los resultados de la soberbia, y refleja lo que hay en el corazón. Por ejemplo, la persona perfeccio - nista, nunca está conforme consigo misma ni con lo que hace, y tampoco se pone de acuerdo con los demás. El perfeccionista se pone metas o normas de exigencia por encima de lo normal; si las consigue, se siente superior; si por el contrario, no las consigue, se frustra, se critica y se menosprecia a sí mismo y a los demás.
Egoísta Es una persona que trata de satisfacerse a sí misma, sin importarle los demás. Esto es un gran problema en el matrimonio y es la razón de muchos divorcios. El hombre orgulloso y soberbio llega a pensar que nada le va a satisfacer en esta vida. Trata de llenar su ego con dinero, fama, sexo y cualquier cosa que crea que puede saciarlo. Busca la auto-gratificación a toda costa y siempre está pidiendo más; nunca logra estar satisfecho.
Competitiva Una persona a la que le gusta la competencia es soberbia, pues lucha por sobresalir y ser reconocida. Al competitivo, le gusta llamar la atención y conseguir los aplausos. Nuestra única compe- tencia es contra nuestro viejo hombre, contra nuestra carne.
Rencorosa La persona rencorosa tiene grandes dificultades para perdonar, no puede aceptar las ofensas porque hieren su ego. Es muy vengativa y siempre está preocupada por su reputación. Este tipo de persona prefiere razonar y complacer su orgullo antes que perdonar. Sin embargo, a una persona humilde la hieren y no le importa si la herida es grande o pequeña (perdona fácilmente).
Voluntariosa y ambiciosa
Esta gente siempre quiere hacer su voluntad. Dice frases como: "eso debería hacerse así" o "yo lo haría diferente y mejor". Es ambiciosa y siempre quiere tener una posición de alto rango en el trabajo, en la iglesia y en todo lugar. Cada vez que se le manda a hacer algo, lo hace a su manera.
Le cuesta creer en la palabra de Dios.
La incredulidad es el producto de la soberbia en un grado avan- zado. La persona soberbia se caracteriza por ser y trabajar inde- pendientemente de Dios; y también, por creer que en sus propias fuerzas, puede lograrlo todo y poseer las bendiciones de Dios por sí misma. Hay ocasiones en que nuestra fe no crece porque hay soberbia en nuestros corazones; porque dependemos mucho de lo que sabemos, y nos cuesta descansar en Dios. Dios no nos va a usar por lo buenos que seamos o porque conozcamos mucho la Biblia. Dios nos va a usar por su misericordia y por su gracia. La soberbia es la raíz de todo pecado, la raíz de toda debilidad, la raíz de toda independencia de Dios; por lo tanto, probemos nuestro corazón, para identificar si tenemos orgullo en algún área de nuestra vida.
Es contenciosa
"Ciertamente la soberbia produce discordia, pero con los prudentes está la sabiduría". Proverbios 13.10.
¿Por qué la persona orgullosa es también contenciosa?
Porque para satisfacer las demandas de su orgullo, está siempre tratando de probar que está en lo correcto. Siempre se está justi- ficando y discutiendo para demostrar que es mejor y superior que cualquier otra persona, a la que pueda estar viendo como una amenaza. Sus ideas son las mejores, sus planes son los mejores y todo lo demás no sirve para nada. Esta actitud es la que la pone en discordia con las personas que trabajan o se desenvuelven cerca de ella. La persona orgullosa no acepta que está equivocada, no admite sus errores y, por esta razón, es contenciosa.
Ya hemos hablado acerca de lo que es el orgullo, pero ahora estudiemos lo que es el espíritu de orgullo (Leviatán).
¿De dónde viene el espíritu de orgullo?
El espíritu de orgullo viene desde que Satanás pecó y su corazón se enalteció en contra de Dios. Fue el orgullo lo que lo llevo a la destrucción. Se encontró en él pecado de iniquidad y orgullo, y por esa razón, Dios lo derribó de los cielos.
Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor; yo te arrojaré por tierra, y delante de los reyes te pondré por espectáculo”. Ezequiel 28.17
Desde ese entonces, de alguna manera cada uno de nosotros ha sido controlado o influenciado por el espíritu de orgullo, unos en mayor grado que otros. Uno de los efectos que provoca la acción de este espíritu es la ceguera mental. La palabra de Dios le llama, espíritu de Leviatán, "el rey de los soberbios".
¿Que es el espíritu de Leviatán?
Leviatán: Significa Rey sobre los hijos de orgullo.
Cuando una persona es controlada o influenciada por el espíritu de orgullo o Leviatán, presenta tres características principales:
· Terquedad.
· Dureza de Cerviz.
· Dureza de corazón.
¿Cómo describe la Biblia al espíritu de Leviatán?
"En aquel día Jehová castigará con su espada dura, grande y fuerte a Leviatán, la serpiente veloz, a Leviatán, la serpiente tortuosa; y matará al dragón que está en el mar". Isaías 27.1
Serpiente veloz, dragón, otras traducciones le llaman el monstruo de las profundidades del mar.
"Aplastaste las cabezas del Leviatán y lo diste por comida a los habitantes del desierto". Salmos 74.14
Ilustración: Se cree que en el triángulo de las Bermudas hay un monstruo marino. Este monstruo marino en el hebreo es "tannen", que es un símbolo egipcio, posiblemente el cocodrilo, que era el dios del Faraón. Leviatán, es un símbolo de fuerza y poder. Recordemos, en el Antiguo Testamento, cómo la vara de Moisés se convirtió en serpiente, para luego comerse las varas de los egipcios, que también se habían convertido en serpientes. Como he explicado, la palabra hebrea para dragón es "tannen", que significa animal marino muy grande -el apóstol Juan dice en Apocalipsis: "vi un dragón". Esto nos indica que estamos lidiando con un espíritu fuerte; o sea, un monstruo que destruye familias, negocios, divide iglesias, y nada lo detiene, salvo el poder del Dios viviente.
Dios formula 14 preguntas en el libro de Job (capítulo 41) acerca del espíritu de Leviatán. A través de cada una de estas preguntas, el Señor nos revela la naturaleza de Leviatán:
1. "¡¿Sacarás tú al leviatán con anzuelo, o con cuerda que le eches en su lengua? 2¿Pondrás tú soga en sus narices, y horadarás con garfio su quijada?" Job 41.1, 2.
Esta pregunta que Dios hace a Job es acerca de la inhabilidad del hombre para dominar por sí sólo este espíritu. Nosotros, los seres humanos, no podemos sujetarlo con una soga, ni atarle su quijada. La única manera de vencerlo es por medio de la unción de Dios, reconociendo en humildad, que nada se puede hacer sin Jesús. El comienzo de la humildad es reconocer nuestras limitaciones y nuestra dependencia de Dios. La persona orgullosa no depende de Dios para vivir y hacer las cosas en su vida; sino que se basta a sí misma para obtener lo que quiere.
2. ¿Multiplicará ruegos él delante de ti? ¿Te hablará con palabras lisonjeras?" Job 41.3
La palabra "ruego" tiene que ver con la oración o petición. Una persona influenciada por este espíritu no considera la oración como algo importante. Hemos encontrado que el espíritu de Leviatán o de orgullo es un obstáculo para la oración. Hay personas que tienen dificultad para orar porque están bajo la influencia de Leviatán; a veces, hasta se quedan dormidas como una manifestación de este espíritu. La gente orgullosa no ve ni siente la necesidad de orar. Las personas humildes reconocen la necesidad de buscar a Dios y de orar porque saben que, sin Él, no pueden vivir. Sin embargo, los orgullosos tomar decisiones sin buscar la voluntad del Señor en oración, pues no lo consideran necesario.
“…el malo por la altivez de su rostro no busca a Dios; no hay Dios en ninguno de sus pensamientos". Salmo 10:4.
A las personas orgullosas, se les hace difícil aceptar y pedir ayuda; y a menudo, hablan en un tono duro. Les cuesta recibir de la gente regalos, ministración, dinero y hasta los favores más pequeños.
3. "¿Hará un pacto contigo para que lo tomes por esclavo para siempre?" Job 41.4
Leviatán no entra en pactos con nadie, pues es un espíritu independiente; nunca se somete ni sirve a otros. El orgullo se convierte en un obstáculo para las personas que entran en un pacto de amistad o una relación íntima. Las personas bajo la influencia del espíritu de orgullo trabajan como Llaneros solitarios; en otras palabras, sin cobertura ni bajo autoridad alguna.
¿Qué es un pacto? Un mutuo acuerdo entre dos partes. A mí, personalmente, me gusta trabajar en relaciones de pacto; pero muchas veces, encuentro que el espíritu de orgullo no nos deja honrar esos pactos. En repetidas ocasiones, vemos divorcios causados por la influencia del espíritu de Leviatán, que hace que las personas no perdonen ni se humillen, prefiriendo así romper el pacto matrimonial.
El orgullo ciega a la persona, impidiendo que reciba y camine en el pacto que tiene a través de la sangre de Jesús. Algunas personas no tienen revelación de lo que es liberación, sanidad, prosperidad, fe y otras verdades que están en la Biblia. Se requiere humildad para recibir la revelación del pacto, y muchas veces, las personas no están dispuestas a humillarse. Por eso, hay muchas verdades hoy día que las personas no entienden, debido a que están cerradas a lo que Dios está haciendo. Es impresionante, ver a muchos creyentes rechazar el bautismo con el Espíritu Santo, a otros rechazar la liberación y a otros, partes del Nuevo Testamento. Ellos dicen: "mi denominación tiene la verdad"; estas expresiones hacen parte del orgullo religioso.
4. "¿Hará un pacto contigo para que lo tomes por esclavo para siempre?" Job 41.4
Un esclavo en Cristo, es un creyente que sirve al pueblo, y si usted quiere servir, se puede encontrar con que el orgullo le va a impedir someterse y servir a otros, puesto que se requiere humildad para hacerla. El orgullo siempre quiere estar por encima y en control. Una persona orgullosa quiere que todo el mundo se someta a ella y le sirva. Uno de los grandes problemas entre los líderes y seguidores de hoy día, es la falta de sometimiento y servicio, porque siempre están buscando una razón para no someterse; especialmente, si lo tienen que hacer con alguien que consideran que sabe menos o que tiene menos tiempo en la iglesia o en el trabajo. Si usted tiene problemas para someterse y para servir, es porque tiene alguna influencia de Leviatán. Jesús es nuestro ejemplo de humildad, ya que Él se humilló y se hizo hombre por nosotros. Uno de los ejemplos de humildad que nos dejó, fue cuando les lavó los pies a sus discípulos.
5. "Pon tu mano sobre él: recordarás luego la lucha y no volverás a hacerla". Job 41.8
El orgullo le dará batalla en todo lo que usted haga. Un consejo importante: Nunca se meta en contienda con una persona orgullosa, porque siempre habrá discusión debido a que la contienda es parte de su vida, es algo que lleva por dentro, y su satisfacción es ver humillada a la persona que se atreva a oponérsele. Toda persona contenciosa es orgullosa. La palabra de Dios nos enseña que Dios resiste a los soberbios.
"Pero él da mayor gracia. Por esto dice: ({Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes". Santiago 4.6
Lo que nos está diciendo esta escritura, es que Dios se resiste, como un general, para no dejar avanzar a una persona que sea orgullosa en ninguna área de su vida, y como resultado, le va mal en todo. Algunos se preguntan: ¿Por qué me va mal en mis finanzas? ¿Por qué me va mal con mis hijos y mi cónyuge? ¿Por qué Dios no contesta mis oraciones? ¿Por qué siempre que hago algo me sale mal? La respuesta a estas preguntas es que hay un general que lo está resistiendo, y ese general, es Dios mismo.
6. "Su espalda está cubierta de fuertes escudos, cerrados estrechamente entre sí". Job 41.15
El espíritu de Leviatán u orgullo se cubre con otros espíritus para protegerse a sí mismo de los ataques. Estos espíritus funcionan como escudos, para volverlo impenetrable. Estos demonios que lo protegen, son con los que se tiene que lidiar primero para luego echar fuera al espíritu fuerte (Leviatán).
Algunas personas no pueden recibir liberación del espíritu de Leviatán porque su reino está protegido con escudos. Por ejemplo, algunas personas influenciadas por este espíritu, se protegen con espíritus de rechazo, lujuria, inseguridad, vergüenza, temor, espíritus religiosos y otros. Todos estos espíritus se encuentran en una persona que tiene espíritu de orgullo. Algunas veces, las personas dan "razones" por las cuales son orgullosas. Todo el tiempo están levantando paredes para no dar amor ni darle el corazón a nadie. Lo más terrible de todo esto, es que la persona que tiene el espíritu de Leviatán, está tan cegada que no se da cuenta de que es orgullosa. Estas razones provienen de los espíritus (escudo del Leviatán), que están ejerciendo su tarea de protegerlo.
Estas escamas están ligadas entre sí, de manera que, ni aun el viento puede penetrar entre ellas. Así mismo es la persona que está cegada por el espíritu de Leviatán, es impenetrable, no se puede llegar a su corazón. Dios mismo tiene que romper ese corazón a través del padecimiento y del dolor para poder penetrar esa coraza. Hágase esta pregunta: ¿Hay algún área de mi vida que es impenetrable, que la estoy cubriendo de alguna manera? El poder de Leviatán es roto, solamente cuando echamos fuera aquellos espíritus que lo protegen.
7. "El uno se junta con el otro de modo que el viento no pasa entre ellos". Job 41.16.
El viento, en el idioma griego, es "pneuma", que significa espíritu; y si lo aplicamos a lo que estábamos hablando anteriormente, diríamos que las escamas están tan apretadas entre sí, que ni siquiera el Espíritu Santo (viento) puede pasar, entrar. El orgullo es un espíritu que bloquea a una persona para que no pueda fluir en lo espiritual. A menudo, las personas a las que les cuesta mucho fluir en los dones del Espíritu Santo y la unción, son las que están batallando con el espíritu de Leviatán. Leviatán gobierna sobre algunos grupos que rechazan el bautismo con el Espíritu Santo y sus dones. El enemigo habla a la mente y al corazón de la persona orgullosa, dándoles razonamientos y excusas, tales como: "tú lo tienes todo, no necesitas nada más, no necesitas cambiar, tu denominación es la correcta y todo el mundo está mal, tú tienes la sana doctrina". Dios quiere cambiar eso por medio de su Espíritu Santo; pero nosotros, por nuestro orgullo, no lo dejamos.
El espíritu de orgullo en una persona, bloquea todo aquello que la pudiera llevar a cambiar para mejorar y ser diferente; bloquea su corazón para que, al momento de ser corregida, rechace la corrección y no pueda crecer espiritualmente, que es lo que sucede cuando una persona recibe la disciplina.
8. "Unido está el uno con el otro, trabados entre sí, no se pueden separar". Job 41.17
Los demonios suman fuerza cuando se juntan (crean una cadena de ataduras en la persona), ayudándose mutuamente para mantener protegido al hombre fuerte. Si estas personas no buscan liberación, pueden permanecer atadas durante muchos años; pero, en el momento en que deciden humillarse y arrepentirse, el Señor puede y quiere obrar en ellas.
9. "18Cuando estornuda, lanza relámpagos; sus ojos son como los párpados del alba. 19De su boca salen llamaradas; centellas de fuego brotan de ella". Job 41.18, 19
Este espíritu es un dragón que se manifiesta a través de la lengua.
"Así también la lengua es un miembro pequeño pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!" Santiago 3.5
Ésta es una referencia obvia al orgullo. Leviatán manifiesta lo que es a través de la lengua. ¿Cómo lo hace?
· Jactándose (recordemos que el soberbio es uno que se jacta de sus logros, que exagera facultades y virtudes que no tiene, y siente en su corazón y dice con su boca que haría cualquier cosa, mejor que los otros).
· Mintiendo exageradamente.
· Maldiciendo continuamente. La persona orgullosa siempre está hablando mal de otros y exaltándose a sí misma.
“Por el pecado de su boca por la palabra de sus labios sean ellos presos en su soberbia y por la maldición y mentira que profieren", Salmo 59.12
Dos de los pecados de orgullo son maldecir y mentir.
Una persona orgullosa se jacta continuamente. Pero, ¿qué es jactarse? Jactarse significa hablar de uno mismo con vanagloria; es alardear, presumir, ostentar de lo que se tiene o se cree ser. ¿Por qué las personas mienten acerca de su edad? ¿Por qué mienten acerca de su estado civil, de su raza, nacionalidad, origen y pasado? Porque un espíritu de orgullo los está influenciando.
10. "De sus narices sale humo, como de una olla o caldero que hierve". Job 41.20
"Un caldero u olla que hierve". La palabra hervir nos da a entender un estado de agitación emocional y sentimental, referentes a la ira y a la contienda. La ira y la contienda son manifestaciones del orgullo.
"Ciertamente la soberbia produce discordia, pero con los prudentes está la sabiduría". Proverbios 73.70
La traducción de English New Bible Translatíons dice: "un hombre que se cree importante a sí mismo, provoca riñas y disputas". Aquellos que son fácilmente dados a las contiendas, a las riñas y a la ira, son controlados por Leviatán. El espíritu de Leviatán es el que incita a las personas a provocar contiendas, chismes en la iglesia, discusiones entre los hermanos y entre los líderes; y también, provoca contiendas en el hogar. La ira y la contienda van de la mano. No preste su lengua para las obras de Leviatán, rechácelo en el nombre de Jesús.
11. "En su cerviz está su fuerza, y delante de él cunde el desaliento". Job 41.22
Hay dos fuentes que manifiestan el Espíritu de Leviatán, y éstas son:
· La testarudez
· La dureza de corazón
De acuerdo al versículo citado, Leviatán es fuerte en su cerviz o cuello. "En su cerviz está la fuerza". Esto se refiere a que el ser testarudo y rebelde es una manifestación del orgullo. Las personas orgullosas odian la sumisión a la autoridad, y son como el mulo, es decir, nunca cambian su mentalidad. A esta clase de personas, yo las considero de "mente cerrada"; nunca salen de su caja. Nunca ceden la razón a nadie.
¿Qué significa ser testarudo "necio-necedad" o de dura cerviz?
La persona que es testaruda, se rehúsa a cambiar; no admite que está equivocada ni pide perdón. Hay algunas personas que se rehúsan a cambiar su vida personal, y por eso, Dios no ha obrado en ellas. También, se rehúsan a cambiar en su matrimonio porque siempre están culpando a la mujer o al hombre, y mientras cada uno no tome responsabilidad de sus actos y se humille, no habrá cambio.
¿Por qué las personas van de iglesia en iglesia y no se plantan en ninguna?
Porque se rehúsan a cambiar. Tienen una luna de miel con el pastor y la iglesia mientras no se les dice nada que los contraríe. Cuando se les dice la verdad, se van. Cuando las hieren, se van, porque no soportan la presión de ser líderes ni la presión de servir. Hay muchos líderes que se rehúsan a cambiar cuando hay un nuevo mover del Espíritu que está siendo desatado en el cuerpo de Jesús; líderes que aman más las denominaciones, las tradiciones, los patrones, la seguridad de su trabajo como pastor que la voluntad de Dios. Éstos se rehúsan a cambiar, siguen con sus tradiciones y dogmas, invalidando la Palabra de Dios. Muestran una gran resistencia al cambio, y todo esto, no es otra cosa que una manifestación del espíritu de Leviatán. Una señal de que usted está creciendo espiritualmente en un lugar, en el ámbito personal y familiar, es que hay cambios en su vida. Los cambios son señales de que Dios está trabajando en su corazón y que usted no lo está resis - tiendo; si está cambiando, regocíjese. Por ejemplo, si antes le gustaba decir malas palabras y maldecir y ya no lo hace, significa que está cambiando. Si antes no diezmaba, y ahora ha decidido obedecer para recibir más bendición diezmando, quiere decir que está cambiando. Si antes era controlado por la ira y ahora usted logra controlar su ira, es porque está cambiando; no está resistiendo a Dios, sino que se está dejando moldear por Él.
12. "Firme es como una piedra su corazón, fuerte como la piedra de un molino". Job 41.24
Una persona influenciada con el espíritu de Leviatán, tiene su corazón endurecido, y por eso, no puede ser sensible a la voz de Dios. El endurecimiento del corazón es causa de las heridas emocionales del pasado y de la práctica del pecado continuo. Esto lleva a la persona orgullosa a endurecer su corazón. Veamos lo que Jesús dijo en Marcos 8.17 "Y entendiéndolo Jesús, les dijo: ¿Qué discutís, por qué no tenéis pan? ¿No entendéis ni comprendéis? ¿Aún tenéis endurecido vuestro corazón?". La palabra "endurecido" es el vocablo griego "poroo", que significa petrificar, formar callo. Esta condición de endurecimiento de corazón, da como resultado ceguera y sordera espiritual. Eso le ocurre a aquellos individuos orgullosos no entendidos ni oidores de la Palabra. Es alguien que casi nunca llora, que no sufre quebrantamiento en su corazón.
13. "Hace hervir como una olla las aguas profundas, y las vuelve como una olla de ungüento". Job 41.31
Una persona orgullosa siempre provoca grandes problemas de contienda dondequiera que vaya, y agita todo a su alrededor. No es sensible a la necesidad de la familia ni de las personas en general. De cosas minúsculas, forma un gran problema, y hace enojar a todos los que están con ella.
14. "Menosprecia toda cosa alta; es rey sobre todos los soberbios". Job 41.34
Menosprecia todo aquello que le hable o le recuerde que hay que humillarse, servir, depender de Dios. Todo aquello que es noble y bueno, lo desprecia. El espíritu de Leviatán menosprecia la oración, menosprecia el amor a los demás, a Dios y a su Palabra, y su único deseo es exaltarse a sí mismo.
¿Cuáles son los espíritus relacionados con Leviatán?
Ira Brujería Arrogancia Perfeccionismo
Contención Rebeldía
Desobediencia Vanidad
Independencia Adivinación
Mentira Rechazo
El espíritu de orgullo es un espíritu que compensa a la persona que se siente rechazada. Cuando una persona se siente rechazada, el orgullo causa que ella sienta una falsa seguridad y que ella se sienta mejor acerca de sí misma. El espíritu de orgullo Causa que la persona se cubra y se esconda, que sienta miedo de ser ella misma, por que eso lo hace vulnerable.
¿Cómo vencemos la soberbia y la arrogancia?
1. Desarrollando la humildad.
¿Qué es humildad?
La palabra humildad viene de la raíz griega "humus", que significa tierra, y de allí, viene la palabra humano "tus” que significa algo terrenal, humano. Recordemos que somos simples seres humanos y no Dios. Reconocer este principio es el comienzo para recibir la liberación del orgullo.
¿Qué es ser humilde?
Significa estar consciente de la esencia de la verdad de quién es uno, ¿cuál es la verdad? Somos meros seres humanos. Es reconocer sin exagerar ni tampoco degradar lo que simplemente somos como personas en Cristo. Por ejemplo, si usted es un buen predicador y lo reconoce, no es pecado, pero si se cree el mejor predicador, en ese momento, se convierte en pecado de orgullo. Por lo tanto, no es degradarse o reducirse uno mismo en la estimación de otro, sino estar conciente del verdadero valor como persona.
"Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno". Romanos 12.3
Usted no puede decidir ser humilde, pues, la humildad es reconocerse en la medida de lo que realmente es. Cuando una persona reconoce su verdadero valor en Dios quiere decir que es humilde.
¿Cómo se expresa la humildad?:
Lavándoles los pies a los hermanos; es decir, sirviéndoles.
“Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasara de este mundo al Padre como había amado a los suyos que estaban en el mundo. los amó hasta el fin". Juan 13.1
Lavar los pies es un acto de: amor, ejemplo limpieza interna y relaciones sociales. La actitud que tuvo Jesús con los discípulos debe ser la misma actitud que nosotros tengamos con los demás, es una forma de destruir el orgullo en la vida de una persona.
¿Cómo trata Dios a una persona orgullosa?
A través del "quebrantamiento, el proceso de trituración, la demolición", entre otros.
"18 Antes del quebranto está la soberbia, y antes de la caída, la altivez de espíritu". Proverbios 16.18
Veamos cómo Dios humilló al rey Nabucodonosor:
"29 Al cabo de doce meses, paseando por el palacio real de Babilonia, 30habló el rey y dijo: ¿No es ésta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad? 31Aún estaba la palabra en la boca del rey, cuando vino una voz del cielo: "A ti se te dice, rey Nabucodonosor: "El reino te ha sido quitado;32 de entre los hombres te arrojarán, con las bestias del campo será tu habitación y como a los bueyes te apacentarán; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que reconozcas que el Altísimo tiene el dominio en el reino los hombres, y lo da a quien él quiere " 33 En la misma hora, se cumplió la palabra sobre Nabucodonosor: Fue echado entre los hombres, comía hierba como los bueyes y su cuerpo se empapaba del rocío del cielo, hasta que su pelo creció como plumas de águila y sus uñas como las de las aves. 34"AI fin del tiempo, yo, Nabucodonosor, alcé ojos al cielo y mi razón me fue devuelta; bendije Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre... Daniel 4.29-34
Recordemos, si no queremos ser repugnantes, odiosos excesivamente ofensivos en la presencia de Dios, no podemos mostradnos por encima de los demás, menosprecian sus talentos y sus dones; no podemos ser egoístas, orgullosos, ni depender de nuestras propias habilidades. El Rey Nabuconodosor tuvo que aprender la humildad por medio del dolor. Eso mismo sucede con aquellos individuos que no quieren pedir perdón, que no quieren reconocer que están equivocados, que no quieren humillarse voluntariamente. Dios tiene que humillarlos, y desafortunadamente, es por medio del dolor y el quebrantamiento que esto se logra
2. Arrepintámonos de andar en orgullo.
Debemos tener en cuenta que el arrepentimiento incluye cambio de mente y de corazón. El arrepentimiento es una puerta abierta que le da acceso a las bendiciones de Dios. Si reconocemos que hemos estado andando en orgullo en algún área de nuestra vida, y nos arrepentimos, entonces Dios nos perdonará y nos bendecirá
3. Renunciemos al espíritu de Leviatán con todo nuestro corazón y confesémoslo con nuestra boca.
Recordemos siempre este verso bíblico:
"Humillaos delante del Señor, y él os exaltará". Santiago 4.10
Repita esta oración conmigo:
¡Padre celestial, yo me arrepiento con todo mi corazón, por haber caminado en orgullo, por haberte ultrajado e insultado. Eso, Señor, es abominable, es asqueroso, es repugnante, es exagerada mente ofensiva delante de tus ojos. Ahora mismo, te pido perdón. Renuncio a toda influencia del espíritu de Leviatán y lo echo fuera de mi vida. En el nombre de Jesús, amén!
Alguna vez...
· ¿Se ha considerado mejor que otro?
· ¿Ha pensado solamente en usted?
· ¿Ha tomado decisiones en las cuales no ha tenido en cuenta a Dios?
· ¿Ha exagerado virtudes, logros victorias?
· ¿Ha menospreciado a alguien por su raza, color o nacionalidad?
Algunos principios importantes:
· El orgullo es la raíz de todos los pecados.
· El orgullo es creerse mejor que los demás.
· La persona orgullosa ultraja a Dios, es abominable, repugnante y ofensiva delante de sus ojos.
· El espíritu de Leviatán es el rey de los orgullosos.
· Las tres características principales del espíritu de orgullo son: la terquedad, la dureza de cerviz y la dureza de corazón.
· El orgullo es el mayor obstáculo para recibir la revelación de la Palabra.
· Hay un sin número de espíritus que se relacionan con el espíritu de Leviatán, tales como: ira, rebelión, mentira, independencia, etcétera.
· Si una persona orgullosa no se arrepiente del orgullo, pasará por situaciones difíciles en su vida.
· La manera de vencer el orgullo es por medio de la humildad y el servicio.
· El Señor nos puede hacer libres del orgullo.
Amen y Amen