sábado, 16 de agosto de 2008

Los Decretos de Gobierno: Tiempos de Victoria

http://www.tiempodevictoria.com.ar/estudios/crecimiento/4

La iglesia de este siglo veintiuno será distinta, considerablemente, a la iglesia del siglo veinte. Y hemos visto varias características que nos indican que eso será así. Cuando hablamos de algo que tiene que ver con el liderazgo, muchas veces la gente toma inmediatamente, como punto de referencia o modelo, a su propio pastor. Aquí es donde quiero que recuerde usted que la iglesia está supuestamente plantada para ministrar a las naciones y que los ancianos que Dios está buscando, son ancianos en las puertas de la ciudad y no precisamente en las puertas de la iglesia. Creo que no necesito recordarte que puertas, en la Biblia, siempre ha representado autoridad, no? Bueno, pero eso no significa despreciar la estructura eclesiástica, significa hablar de una dimensión superior.
Estamos hablando del efecto de la iglesia para con la sociedad. Que es como decir ser Sal y Luz en la tierra. Que es como decir de lo que Dios espera de su mente, de su forma de pensar, para poder prevalecer en este siglo. En este siglo cronológico, el veintiuno, y en este siglo-Kosmos, es decir: sistema. Muchas de las características que hoy todavía tenemos tendrán que cambiar porque las bases espirituales para operar en este siglo no son las mismas que hemos aprendido y que hoy ya están agotándose.
Queremos definir, entonces, cuales son las cosas que debemos esperar. Qué estructura pensante debemos tener que nos permita fluir con esas bases para el siglo presente. Vamos a leer ahora del libro de Jeremías. Y no se crea que es historia. Muchos principios se encuentran enterrados en los procesos proféticos del Antiguo Testamento.
(Jeremías 30: 3)= Porque he aquí vienen días, dice Jehová, en que haré volver a los cautivos de mi pueblo Israel y Judá, ha dicho Jehová, y los traeré a la tierra que di a sus padres, y la disfrutarán.
Note que 2 Timoteo nos dice que toda escritura que es inspirada por Dios nos sirve de provecho, dice el original. Dice que la iglesia va a regresar a los Hechos. Nosotros leemos la Palabra y no tenemos ninguna conexión ninguna entre lo que leemos y la realidad. Es decir que, no son historias. ¡Sucedió! Lo que estamos leyendo no es una historia, es algo que de veras sucedió. Entonces, cuando hablamos de volver a los principios de la iglesia primitiva, por ejemplo, no podemos traer como conceptos a nuestra mente, inmediatamente, el vernos operar de la misma manera.
Sin embargo, hubo una gente que sí lo hizo. Comunes, como usted o yo. Y hoy nosotros tenemos aun, hasta mayor capacidad de entendimiento porque tenemos historia para referirnos a ello. Mucha es la gente que no encuentra relevancia con la letra y la vida. Por eso, ministerios muy singulares que traen palabra relevante al día presente, a veces son un poco chocantes porque no estamos acostumbrados a actualizar la letra todo el tiempo. Sin embargo, ese es el provecho que usted le puede sacar al libro: poderlo encarnar y vivirlo día a día.
Este verso, dice que la realidad y la Escritura se unen en el mundo natural. Que vamos a poder disfrutar el regreso, o sea: vamos a poder encarnarlo, vamos a poder vivir las cosas que Dios está haciendo. Lo que hoy consideramos como iglesia, no es el concepto que Dios tenía para la iglesia. Repito: Lo que hoy conocemos como La Iglesia, es decir: la mentalidad, cuando uno menciona iglesia, lo que a usted le viene a la mente, no es lo que Dios tenía en mente cuando dijo que quería hacer la iglesia.
Cuando usted dice iglesia, inmediatamente le viene a su mente una fotografía de lo que es una iglesia. Pero cuando Dios dice iglesia, no ve absolutamente nada de lo que usted ve. Y la iglesia de este siglo va a emparejarse con la visión de Dios. Van a haber muchos cambios. Así que no se conforme, no acepte la actitud de que ya hemos llegado, sino que nos vamos a tener que identificar con nuevas dimensiones.
(Jeremías 31: 1)= En aquel tiempo, dice Jehová, yo seré por Dios a todas las familias de Israel, y ellas me serán a mí por pueblo.(2) Así ha dicho Jehová: el pueblo que escapó de la espada halló gracia en el desierto, cuando Israel iba en busca de reposo.(3) Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia (Note que el tiempo del desierto, fue todo misericordia, pero ahora está cambiando. Se hace mucho hincapié, permanentemente, en la misericordia de Dios, la cual es cierta y verdadera. Pero los hijos de Dios no han sido llamados a vivir permanentemente bajo la misericordia de Dios, sino bajo el poder de Dios, que no es lo mismo.)
(4) Aun te edificaré, (Está hablando de que hay ministerios con palabra fresca y dinámica) y serás edificada, oh virgen de Israel; todavía serás adornada con tus panderos, y saldrás en alegres danzas. (Vemos el tiempo presente representado allí.)
(5) Aun plantarán viñas (Ahí vemos el gobierno apostólico, ministerios de implantación, de impartición, de inseminación) en los montes de Samaria; plantarán los que plantan, (No los que riegan. Pablo dijo: yo planto, hay otros que riegan. Ministerios de gobierno son los encargados de plantar, los otros no. Hay gente que quiere regar sin haber sido plantados. Yo planto y Apolos riega. Después vendrán otros que no sé qué harán. Hay ministerios de implantación. Le dice que plantarán los que plantan, no a los que se les da la gana de plantar. Cuando el ojo espiritual está entrenado, estas cosas se ven enseguida) y disfrutarán de ellas.
(6) Porque habrá día en que clamarán los guardas (Que son los atalayas) en el monte de Efraín; (Esto habla de doble fruto) levantaos, y subamos a Sión, a Jehová nuestro Dios.(7) Porque así ha dicho Jehová: regocijaos en Jacob con alegría, y dad voces de júbilo a la cabeza (Al liderazgo) de naciones. (Conferencias de valor gubernamental. ¿Por qué? Porque tendrán que ser en ellas donde funcionarios de gobiernos seculares tendrían que tomar contacto no sólo con la Palabra auténtica de Dios, sino también con la manifestación de su poder. Ya está sucediendo. Descarte ese entretenimiento cristiano anunciado en diarios y revistas y observe: ya está sucediendo. ¡Vienen iglesias-corralitos, por decir algo que conocemos muy bien!) haced oír, alabad, y decid: oh Jehová, salva a tu pueblo, el remanente de Israel.
Este es un tiempo identificado con la extensión de la palabra por todas las naciones, pero de ninguna manera por fiestas religiosas. De palabra profunda y direccional a nivel nacional e internacional. Hombres de integridad hablando a nivel de gobierno para los naciones. Hay profetas nacionales, hay apóstoles de dirección nacional; distintas dimensiones, distintas unciones, distintas operaciones, un solo cuerpo y un mismo Señor.
Ahora vamos a identificar el tiempo apostólico. Dice el verso 4: Te edificaré y serás edificada. Lo primero que vemos es que el tiempo apostólico estará identificado por la reedificación. Los apóstoles, edifican. La sabiduría labró sus siete columnas. Los gobiernos de los apóstoles, traen una palabra de edificación. Eso no quiere decir que le palmee a usted la espalda, sino que le edifican, le colocan en los lugares correctos, para que el cuerpo llegue a la medida del varón perfecto. La palabra justa es que le construyen, no que le endulzan con palabras lisonjeras o halagüeñas. Edificar no quiere decir bendecirle. Edificar quiere decir construirle. Y a veces, para hacerlo, tienen que destruir su estructura pensante.
Nuestras estructuras, nuestras posiciones, operaciones tendrán que modificarse. Una iglesia del siglo veintiuno no podrá tener una apariencia de una iglesia del siglo diecinueve. Vemos que vamos a ser adornados por danzas y alabanzas. ¿Cuántos saben que eso ya hace bastante tiempo que llegó? Y no estoy hablando del profesionalismo eclesiástico, estoy hablando de una estación de la iglesia que es sobrenatural y sirve para adornarnos. Es decir que ahora estamos muy atractivos para el que no conoce, porque se ve una iglesia viva, alegre, bulliciosa, gozosa, que se alegra. Le gente viene aunque sea por curiosidad. Antes, la gente escondía la Biblia, para ir al templo la metían en una bolsa de papel. Hasta organizaciones cristianas comenzaron a vender portabiblias, que eran una especie de carteras que, si bien se vendían con el argumento de protegerla, la realidad era que una gran mayoría la utilizaba para ocultarla y no ser detectado no ya como creyente, sino como evangélico, que era lo que realmente le traía problemas.
O sea que la iglesia tuvo en un momento una atracción sobrenatural sobre la gente porque estábamos en una época de adorno. Estábamos, sobrenaturalmente, siendo adornados por Dios. La gente se veía linda. Los cristianos se veían más hermosos que los no cristianos. Por la sección adonde Dios nos ha llevado, es donde el apetito es por sabiduría. La gente está buscando soluciones. Y la Palabra demanda que la iglesia se convierta en monte al cual suben las naciones a buscar ideas.
Antes, el que venía a la iglesia, (Y lo digo así porque así es la costumbre, aunque en realidad debería decir que venía al templo), sólo venía si estaba enfermo, o se le había muerto alguien o si se iba a casar. Ahora no; ahora es popular ir a la iglesia. A todo el mundo le gusta ir a la iglesia. Pero después viene la época del pacto. El verso 5 dice que esta caracterizado por plantaciones, por tiempos de siembra. El tiempo apostólico es un tiempo donde vienen ministerios a implantar en usted fundamentos. La mayoría de los hombres que están en esa labor, no son conocidos. Vienen de lugares desconocidos, marginados y de escaso nivel social y cultural. No es incoherente que salgan muchos de Sudamérica, si es que consideramos qué concepto tiene el mundo de Sudamérica. En suma: generalmente vienen de lo que el mundo considera como Tercer Mundo. Los mejores predicadores y los mejores libros cristianos, ya no son los estadounidenses. Distintas operaciones.
Recuerde que los ministerios que plantan, son los ministerios que predican por impartición. Déjeme explicarte un poco sobre eso. Impartición es una palabra que tiene la habilidad en sí mismo, de no regresar vacía. Porque es un pedazo de la mente de Dios. Es un mensaje de Dios. De Isaías 55:11, que no regresa vacía. Que lo penetra; la escuchó y, aunque no la entienda, se mantiene viva dentro suyo. Y cuando le llegue la oportunidad de decidir algo, tenga que ver con aquello que escuchó, ella le activa y le juzga. Le hace crecer al instante. Mucha gente piensa que mensajes como estos son abrumadores. Dios ha enseñado un principio, que es el principio del poder de uno. Es muy sencillo: por un hombre entró el pecado a todo el mundo y por un hombre se solucionó el problema.
Cuando el impulso de la iglesia es sazonar la sociedad, y vive en una sociedad que en verdad está bien corrompida, se siente a la tarea un poco abrumadora. Pero no es tiempo de hacer algo por alguien, sino por uno, por uno y por uno. Y si cada cual toma uno, uno a uno termina con el problema. El poder de uno. Nunca piense que el mensaje es abrumador, se puede.
Es muy importante que usted entienda eso. Su trabajo es influenciar el área donde Dios le ha plantado. Despreocúpese de la ciudad en su trabajo. Sólo gánese a uno este mes. Si cada familia de una iglesia pudiera ganar para Cristo a una familia por año, en cinco años, no habría templo que pudiese albergar a los creyentes que habría. ¿Y cómo lo va a hacer? ¡Por el testimonio! Que su victoria sobre la situación presente sea tan sobrenatural que esa familia anhele ser como usted. Claro; eso deja en evidencia que, antes que salir a ganar gente para un Cristo de vida abundante y victoria, primero esa vida y esa victoria tendrán que verse manifestada en nuestras vidas.
Vienen ministerios de plantación e impartición, con una palabra tipo bomba-taladro. Primero taladra la coraza de la incredulidad, luego se mete en el interior y, una vez adentro, recién explota. Recuerde que hay distintas operaciones, distintas manifestaciones. Usted no puede regar, o tratar de enseñar, o edificar sobre un fundamento que no ha sido plantado. Me explico: unir la verdad presente, no es lo mismo que estar establecidos en la verdad presente. Mucha es la gente que sabe cuál es el mensaje que está de moda, pero no está establecida allí. Entonces, como ya saben el mensaje que está de moda, se ahorran el dinero y quieren regarlo. ¡No funciona! Pastor o predicador que me estás leyendo: si no tiene la unción para plantar, está regando en vano.
Establecer es encarnar. Los ministerios apostólicos establecen iglesias. Eso no significa que algo comienza en una clase bíblica y termina siendo iglesia. Puede incluirlo, pero ese no es el énfasis. Establecer iglesias es entrar y establecerlas según los fundamentos de verdad hasta que se entiende y se pone por obra y se vive. Eso es fundamento apostólico, no contratar ingenieros, arquitectos, maestros mayores de obra y edificar templos. Y eso lo puede hacer cualquier creyente con cualquier clase de iglesias. Puede incluirlo, pero el apóstol es portador de poder de establecer al creyente sobre una verdad.
Tenemos que entender la diferencia. Mire el verso 7 una vez más. Así ha dicho Jehová: regocijaos y dad voces. Voces. Tiempo no solamente de implantación, decretos de gobierno, de fuertes imparticiones, de nuevas zonas geográficas de conocimiento, de colocación de nuevas estructuras pensantes. Todo eso tiene que ver con la definición de plantar, expandir nuestra tienda. Para los rebeldes es muy difícil esto. Para el obstinado también. Para el que no le interesa la objetividad, esto no es nada porque no lo entiende. O sea: el que hace las cosas por hacerlas, es el que con este mensaje no se lleva de acuerdo, no se lleva bien. Pero el que está buscando un propósito, ese sí se lleva de perlas. Para encasillar una objetividad en la vida de la iglesia.
Pero dice aquí que las voces claman, que los guardas alertan. También es un tiempo identificado por decretos proféticos. Los guardas, identificados con los atalayas en los muros, los profetas. Habla de que el tiempo apostólico está caracterizado por una fuerte intercesión profética. Una oración con mando, con poder, una oración de voltaje gubernamental. Ese corazón que dice: Véngase su reino y que se haga su voluntad. Una intercesión de gobierno, de acción, de poder y señorío, jamás de queja, lamento y gimoteo. Un clamor profético, y lo hace desde el lugar de Efraín, que es de doble fructificación, del fruto abundante, de doble oración que decreta y demanda. “Señor, incrementa la medida”. Señor, produce abundancia. Envíanos la siega. Decretos que dicen; pide lluvia en tiempo de lluvia. Hay una unción sobre la oración de la iglesia del siglo veintiuno, donde cada creyente tendrá la unción gubernamental del movimiento apostólico. Los cinco ministerios fueron dados para perfeccionar a los santos por medio de la reproducción de su unción sobre la iglesia.
Cuando fuimos expuestos al ministerio del pastor que tiene como énfasis el corazón de Dios en cuanto al amor para congregar, la iglesia oraba amorosamente. Luego la acrecentamos a esa oración visión mundial para el perdido. Ahora la iglesia oraba amorosamente con un corazón por el perdido. Luego le acrecentamos la unción del maestro. Ahora la iglesia le daba a su oración la tonalidad de pedir entendimiento, cuando antes no le interesaba. Pero entonces vino el mover profético y se vino la guerra espiritual y se le añadió al amor esta visión del mundo y el interés por la palabra. También se ora en guerra espiritual. Ahora viene el mover apostólico. Son decretos de gobierno. Ya no es guerra espiritual, va más allá.
Jeremías 1:10 dice que viene una unción que nos dará poder sobre las naciones. Y está caracterizado con el tiempo profético: derribar, arrancar, barrer y desmenuzar. Pero después que se van los profetas, ve unción de edificar y plantar. Apóstoles: Ahora somos famosos por zonificar la ciudad de acuerdo con el mapa de Satanás. ¿Recuerda cuando fueron allí, a pelear contra Israel, y dijeron: vamos a pelear en el llano, porque el Dios de ellos es Dios de los montes y en los llanos les vamos a ganar? Dios dijo: para que sepan que yo no soy un “diosito”, sino que soy un Dios grande, les voy a ganar en el monte y en el llano también porque toda la tierra es mía.
La zonificación geográfica o cartografía espiritual es buena, porque hasta los demonios usan la estrategia de zonificar para vencer. Es legítima, pero hay una unción superior que ahora viene. Más allá del entendimiento de donde está reinando Satanás y cuantos siglos lleva allí establecido, estamos edificando el plan de Dios en medio de su fiesta y derribándosela en el nombre de Jesús. Una unción de gobierno, de decretar el mapa de Dios y manifestarlo, ignorando que Satanás existe. Si usted trae a Dios, Satanás corre, hombre. Sólo que para traer el mapa o el plan de Dios, hay que entender sus tiempos. Tiene usted que ser influido por la gente que tiene la habilidad de reconocer los tiempos, mostrando el fruto, penetrando, orando violentamente pero en decretos de gobierno. Ya no es grito, lenguas o gesticulosidades. Es: pide lluvia en tiempo de lluvia. Pido lluvia, decreto prosperidad pero que salga de un hombre que cree que lo va a recibir. Gobierna la esfera espiritual. Entonces, ya no estás peleando, sino estableciendo. Eso es lo que viene.
Pero esto viene al ser expuesto a ministerios gubernamentales. Y cuando se le vaya reproduciendo la unción en la iglesia del mismo modo que se reproduce la oración amorosa, llegará el momento en que la iglesia ahora dice: pido abundancia. Es tiempo de madurez. ¡En el nombre de Jesús! ¡Establece tu voluntad! Y ya lo está creyendo, ya lo practica, ya es algo normal en su vida cotidiana. Y cuando usted lo dice, los demonios dicen: aquí este hombre con el mapa de Dios.
La iglesia del siglo veintiuno ya no puede venir a un templo a cantar dos horas y a recibir un mensaje de cuarenta y cinco minutos e irse a casa. Esto no va a ser la iglesia. Puede decir conmigo, si quiere, ¡Yo no quiero eso! Los profetas claman y dicen: levantaos. Y si vamos a Sión, Jehová es nuestro Dios. No es tiempo de favoritismos, no es tiempo de prestigios personales, es tiempo de decretos de gobierno.
En el verso 7 y hasta el 12, vemos otra cosa muy importante. El 8, dice: He aquí los hago volver. Ahí vemos lo que vimos antes. De la tierra del norte, y los reuniré de los fines de la tierra, y entre ellos ciegos y cojos, la mujer que está encinta y la que dio a luz juntamente; en gran compañía volverán acá. Note que la gente que está preñada de potencial, dará a luz.
(9) Irán con lloro, mas con misericordia los haré volver, y los haré andar junto a arroyos de aguas por caminos derechos en el cual no tropezarás; porque soy a Israel por padre, y Efraín es mi primogénito.(10) Oíd palabra de Jehová, oh naciones, y hacedlo saber en las costas que están viejos, y decid: el que esparció a Israel lo reunirá y guardará, como el pastor a su rebaño. (11) Porque Jehová redimió a Jacob, lo redimió de mano del más fuerte que él.(12) Y vendrán con gritos de gozo...
Aquí vemos que este tiempo va a estar caracterizado por un poder de congregación sobrenatural. Todo el mundo vendrá a unirse en la misma causa. Va a ser una generación caracterizada por el poder de rompimiento del poder satánico. Vamos a poder destrozar la mano que era más fuerte que nosotros. Vamos a tener una unción para quitarle la mano del más fuerte en la iglesia.
Dice allí que hasta las que están encintas con potencial van a dar a luz. Ha llegado el tiempo de dar a luz. No me interesa quien dijo que éramos ciudadanos de segunda categoría. O si éramos negros o éramos indios. Penetre la fuente y asalte los muros, no se limite a las cosas naturales. Su alcance es ilimitado. Piense en grande: usted es grande.
Un decreto que demanda que el orden de la operación espiritual se conforme a los decretos divinos y no al de la mente negativa del hombre mundano. Así que el énfasis es a un cambio de tiempo. Orden divino. Productividad, fuerza y todas las cosas que vivimos en Caleb y en Josué, que también vivimos en Jehú, toda esa gente que caracteriza al mover gubernamental apostólico.
(15) Así ha dicho Jehová: voz fue oída en Ramá, llanto y lloro amargo; Raquel que lamenta por sus hijos, y no quiso ser consolada acerca de sus hijos, porque perecieron.(16) Así ha dicho Jehová: reprime del llanto tu voz, y de las lágrimas tus ojos porque salario hay para tu trabajo, dice Jehová, y volverán de la tierra del enemigo.
Una generación caracterizada por el regreso de nuestros hijos; el enemigo los soltará! ¡En el nombre de Jesús! Una generación que va a ver a la juventud regresar a Dios. Viene un grande avivamiento para la juventud de Dios. Hay esperanza, también, para su porvenir. Porvenir habla de prosperidad, habla de generación próxima. Dice Jehová: Los hijos volverán al propio lugar donde Dios los tenía.
Las juventudes volverán. Los hijos que no querían saber nada con estas cosas, ahora van a querer saberlas. Una generación caracterizada por juventud fuerte, que entienda que la nación depende de su futuro y que ellos no dependen de la nación. La expectativa natural de que los hijos sean mayores que los padres. Y por lógica y obvia conclusión, el final de la hipocresía, que por años ha signado al pueblo de Dios y ha determinado que tantos y tantos hambrientos no pudieran acceder al alimento porque desconfiaban con justas razones de su calidad.