viernes, 24 de febrero de 2012

Los dones del Hijo (I): Apóstoles y profetas



http://www.escuelasbiblicas.org/material/211-LosDonesDelHijo-I-(Apostoles,Profetas).pdf

Ahora bien, hay diversidad de dones; pero el Espíritu es el mismo.  Hay también diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo.   También hay diversidad de operaciones, pero el mismo Dios es el que realiza todas las cosas en todos.
1 Corintios 12:4
Por tanto dice: Subiendo a lo alto, tomó cautiva la cautividad, dio dones a los hombres.  Y el mismo dijo: unos apóstoles; otros, profetas; otros, evangelistas; y otros pastores y maestros.
Efesios 4:8, 11
Cuando el apóstol Pablo le explicó a la Iglesia de Corinto acerca de los dones para que no fueran ignorantes acerca de los dones mismos, hizo tres clasificaciones: diversidad de dones, los cuales son dados por el  Espíritu Santo; diversidad de ministerios, que son dados por el Hijo y diversidad de operaciones, dadas por el Padre.
Los cinco ministerios son dones en forma humana que Jesucristo ha repartido a la Iglesia, para que alcance la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, hasta llegar a la estatura del varón perfecto, a la medida de la plenitud de Cristo; para equipar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo (Ef. 4:12).  Según la carta a los efesios los cinco ministerios son: apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros, veamos los primeros dos:

1. APÓSTOLES
La palabra “apóstol” se traduce del griego “apostolos”, que significa: Uno que es enviado y mensajero. (Strong 652) y de “apostello” que quiere decir: Enviar para un servicio o una comisión (Strong 649). Este vocablo describe la relación que existe entre el ministro y Cristo (Diccionario Vine), que si fuera necesario no le importa morir para cumplir con su llamamiento (Hch. 20:24)
La Biblia muestra tres tipos de apóstoles:
A. Enviados por el Padre, He. 3:1
La Biblia indica que Jesucristo fue el apóstol enviado por el Padre para realizar su Obra.
B. Enviados por el Hijo,  Mt. 10:2-4; Ap. 21:14
Los doce discípulos fueron los elegidos por el Señor para ejercer el ministerio apostólico. Ellos lo acompañaron en su ministerio terreno, vivieron con él, fueron testigos oculares de la manifestación de su poder.
Las instrucciones para ellos fueron: Ir a las ovejas perdidas de la casa de Israel a predicar que el reino de los cielos se había acercado, que sanaran enfermos, resucitaran muertos, limpiaran leprosos, expulsaran demonios, dando de gracia lo que de gracia recibieron (Mt. 10:6-8), al ser escogidos y enviados por el Hijo, la Biblia los identifica como “Apóstoles del Cordero”
C. Enviados por el Espíritu Santo
Posterior al ascenso de Jesucristo a los cielos, fue el Espíritu Santo el encargado de escoger y designar a quienes desarrollarían las funciones apostólicas (Ef. 4:11-13), por ejemplo:
I. Bernabé (Hch. 14:4,14)
II. Pablo (Hch. 14:4, 14)
III. Sóstenes (1 Co. 1:1; 4:9; 9:5)

IV. Silas (1 Ts. 1:1; 2:6)
V. Timoteo (1 Ts. 1:1; 2:6)
D. FUNCIONES APOSTÓLICAS
I. Establecer doctrina, Hch. 2:41-42; Ef. 2:20
Los apóstoles establecen la sana doctrina como fundamento para crecer hasta ser un templo santo en el Señor
II. Cubrir, Mt. 28:18-20
Cuando el Señor Jesús resucitó, le fue dada toda potestad en el cielo y en la tierra, y prometió que estará cubriendo a los suyos todos los días hasta el fin del mundo.  Ese poder fue delegado a los cinco ministerios. (Mt. 23:37-39; Ef. 2:20-22)
III. Enviar, Hch. 7:35, 9:5-18; Mt. 10:6-8
Así como el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo enviaron a sus mensajeros con comisiones específicas, así el apóstol, guiado por el Espíritu Santo, tiene la facultad de enviar a ministros para realizar la obra de Dios.
2. PROFETAS
La palabra “profeta” se deriva del griego “profetes” que significa: Uno que habla pública y abiertamente, proclamador de un mensaje divino. (Strong 4396), y es una palabra formada de las raíces griegas “pro” que significa: Antes de. (Strong 4253), y de “phemi” que significa: Hacer conocidos los pensamientos de uno, declarar y para decir. (Strong 5346). También existe el término griego “prophetis” que significa: Profetiza, es decir, una mujer a quien se le revelan eventos futuros o cosas escondidas a través de inspiración, sueños o visiones (Strong 4398; Lc. 2:36).
Algunos ejemplos de profetas en el Nuevo Testamento son:
A. Juan el bautista, Mt. 11:9-10
B. Ana, Lc. 2:36
C. Agabo, Hch. 11:27-28; 21:10
D. Las hijas de Felipe, Hch. 21:9
E. FUNCIONES PROFÉTICAS EN LA IGLESIA.  
La Biblia enseña que las funciones del ministerio profético, en el cuerpo de Cristo son:
I. Hablar de parte de Dios, He. 1:1
Dios envía mensajes por medio de los profetas anunciando su consejo, el profeta debe mantener sus sentidos espirituales sensibles a la voz de Dios, para hablar de parte de Él, y no de su propia cuenta (Dt. 18:18-20).
II. Proteger, Mt. 23:37-39; Lc. 13:34
En el Antiguo Testamento vemos cómo Dios envió profetas para reunir a su pueblo bajo sus alas protectoras y ahora en el tiempo de la gracia, Dios levanta profetas cuyo propósito es proteger al pueblo de Dios. 
Dios manifiesta a su pueblo el beneficio de los dones del Hijo; para alcanzar la estatura del varón perfecto y la plenitud de Cristo, de manera de estar preparados para cuando el Señor Jesucristo regrese por su Novia.