¿LÍDERES O MINISTROS?
1a Pedro 4:11:
11 Si
alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra,
ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado
por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los
siglos. Amén.
Curiosidad: La
palabra líder no aparece en la
Biblia , ni ninguna variación de esta, mas sin embargo la
palabra ministro aparece según la concordancia de la Biblia Devocional de Estudios (Versión RVA 1960) la
cantidad de 19 veces como ministro (con sus variaciones como Apóstol o Siervo)
y 26 veces mas en sus variaciones de ministerio (como administración,
apostolado, dispensación, sacerdocio o servicio), ministración (en variación
con servicio) y ministrar (en variación con servir).
Significado:
Διακονέω: diakonéo de G1249; ser servidor, i.e. servir a
(domésticamente o como anfitrión, amigo, o [figurativamente] maestro); técnicamente
actuar como diácono cristiana: administrar, ayudar, diaconado, expedir,
ministrar, servir.
De aquí sale la palabra SIERVO:
Definición de “siervo”: El siervo de Dios es
aquella persona que está dispuesta a:
1.
Hacer lo
que Dios pida.
2.
Cuando El
lo pida.
3.
Donde El
lo pida.
4.
No importa lo que El pida.
Esto se conoce como obedecer La Voluntad del Padre.
La palabra siervo significa
esclavo (doulos). Describe a alguien
que está sujeto a la voluntad de Su Señor, y totalmente a la disposición de él.
Al usar este término para describirse, los apóstoles están expresando su
absoluta devoción y sujeción a Cristo, están expresando su actitud de
absoluta obediencia hacia Cristo, algo a lo que no sólo los apóstoles fueron llamados,
reitero, sino todos los que somos de Cristo. Es esa
obediencia incondicional la que nos va habilitar para ser siervos efectivos.
Características
claves para el ministerio:
1. Obediencia: Siervo significa esclavo, es
decir, que hace lo que su amo le pide (Génesis 12:1-3).
2.
No es opción, es llamamiento (Romanos
11:29).
3. Es capacitado: Es decir, vas a conocer y
a entender la Palabra
de Dios, porque si no la conoces no vas a poder ejercer bien el mandato (Josué 1:8,
Efesios 4:12-13).
4.
Es de Dios hacia nosotros: El ministerio
es algo bueno si es anhelado (1ª Timoteo 3:1).
5. Somos hechos competentes: Es decir, en
Dios no hay mediocridad porque El lo hace todo bueno (2ª Corintios 3:5-6, Génesis
1:31).
Cuando
El Padre nos llama, obedecemos. El no hacerlo nos puede traer consecuencias (Jonás
fue tragado por un pez). El no llama porquerías porque si te llamo es porque Tu
puedes (1ª Pedro 2:9-10, Filipenses 4:13).