viernes, 16 de mayo de 2008

La verdadera unidad del Pueblo de Dios (Ezequiel 37:15-28)

Mensaje predicado por este servidor en New York y en California y un llamado profetico a la unidad del pueblo de Dios.



Eze 37:15 Y vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo:
Eze 37:16 Y tú, hijo de hombre, toma una vara y escribe en ella: "Para Judá y para los hijos de Israel, sus compañeros." Toma luego otra vara y escribe en ella: "Para José, vara de Efraín, y para toda la casa de Israel, sus compañeros."
Eze 37:17 Júntalas la una con la otra en una sola vara para que sean una sola en tu mano.
Eze 37:18 Y cuando los hijos de tu pueblo te hablen, diciendo: "¿No nos explicarás qué quieres decir con esto?",
Eze 37:19 diles: "Así dice el Señor DIOS: 'He aquí, tomaré la vara de José, que está en la mano de Efraín, y las tribus de Israel, sus compañeros; las pondré con aquélla, con la vara de Judá, y las haré una sola vara, y serán una en mi mano.'"
Eze 37:20 Y las varas en que escribas estarán en tu mano a la vista de ellos,
Eze 37:21 y diles: "Así dice el Señor DIOS: 'He aquí, tomaré a los hijos de Israel de entre las naciones adonde han ido, los recogeré de todas partes y los traeré a su propia tierra.
Eze 37:22 'Y haré de ellos una nación en la tierra, en los montes de Israel; un solo rey será rey de todos ellos; nunca más serán dos naciones, y nunca más serán divididos en dos reinos.
Eze 37:23 'No se contaminarán más con sus ídolos, ni con sus abominaciones, ni con ninguna de sus transgresiones; sino que los libraré de todos los lugares en que pecaron y los limpiaré. Y ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios.
Eze 37:24 'Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; andarán en mis ordenanzas y guardarán mis estatutos y los cumplirán.
Eze 37:25 'Y habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres; en ella habitarán ellos y sus hijos, y los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo David será su príncipe para siempre.
Eze 37:26 'Y haré con ellos un pacto de paz; será un pacto eterno con ellos. Y los estableceré, los multiplicaré y pondré mi santuario en medio de ellos para siempre.
Eze 37:27 'Mi morada estará también junto a ellos, y yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.
Eze 37:28 'Y las naciones sabrán que yo, el SEÑOR, santifico a Israel, cuando mi santuario esté en medio de ellos para siempre.'"

Una iglesia sin unidad es vacía, sin poder. Para que el pueblo de Dios recibiera el poder del Espiritu Santo tuvieron que estar unánimes en el aposento alto [Hec. 2.1-4]. La unidad en el Espiritu, no en denominaciones, es esencial para el pueblo del Señor; es esencial la Paz del Señor [Efesios 4.1-16].
La iglesia deber estar en el mismo sentir en lo siguiente, y en nada más fuera de esto: El Señor, en su cuerpo, y en el mismo Espiritu [1ra. Corintios 12.14-26], quien es el único mediador [1ra. Timoteo 2.5]; la misma fe, no en las obras de tal o cual cosa, para que nadie se gloria [Efe. 2.9]; el ministerio de la gracia [Romanos 3.21-23]; la ley de la Fe [Romanos 3.27-28]; la doctrina del bautismo en el Espiritu Santo para regeneración de la vida pasada [Efe. 4.3-6, 2da. Corintios 5.17], y de un Dios y Padre nuestro, de todos nosotros, sin otro mediador, el cual es sobre nosotros, y por todos nosotros, y en todos nosotros, un Dios, no un Dios Padre y Madre, solo un Dios Padre.
¿En donde fallamos? En tratar de imponer dogmas que están fuera de esta doctrina. Jesucristo mismo habló de esto, de las cargas pesadas de los fariseos [Mateo 23.13], las cuales ni ellos mismos las pueden llevar [Mateo 23.4]. Los fariseos que habían creído eran los que mandaban a los gentiles a llevar las cargas pesadas de la ley, y a circuncidarse [Hechos 15.5]; por ellos es que el concilio de Jerusalén fue convocado [Hechos 15]. Los Apóstoles condenaban esto [15.10-11]. De lo único que el Espíritu Santo mando a los gentiles a abstenerse fue de alimentos ahogados, la contaminación de los ídolos, fornicación y de sangre, de la sangre ingerida por alimento [verso 20{para la sangre ver el contexto de Levitico 17.10-16}]. Tratando de imponer cargas pesadas fallamos: Que si usar el velo, pelo largo o cortarse el cabello [ver contexto de 1ra. Corintios 11.1-16]; que si reunirnos sábados o domingos [ver Colosenses 2.16]; que si falda o pantalon, cuando sabemos que hay faldas que escandalizan mas que muchos pantalones; usar pantalla o no pantalla; rudimentos y cargas pesadas de la ley, cuando lo que mora es la vida del Espiritu [Oseas 6.6, Romanos 8.1-27].
El Señor busca gente que le obedezca a El, gente en quien el pueda confiar [Juan 15.15]. La iglesia tiene que dejar las cargas de la ley y las falsas unidades ecuménicas y comenzar a buscar la Unidad en el Espiritu [Efesios 4.3-6], a vivir en la gracia [Romanos 6.14], a dejar de tomar leche y ser niños, e irnos perfeccionando en la gracia [1ra. Corintios 3.2, Efesios 4.12-13]. Solo asi seremos un pueblo bajo el mismo rey[Eze. 37.21-22] y podremos ir a recoger la siega, pues los campos están listos para la cosecha de almas de este ultimo tiempo [Juan 4.35].
UNA UNIDAD EN EL ESPIRITU, EN LOS FRUTOS DEL ESPIRITU, NO DE DENOMINACIONES, PUES HAY UN PUEBLO DE DIOS EN TODAS LAS IGLESIAS CRISTIANAS QUE BUSCAN DEL SEÑOR EN ESPIRITU Y EN VERDAD.